Coutinho se presentó por fin en el Bayern de Múnich y lo hizo de una manera algo extraña. "Espero estar aquí muchos años y ganar muchos títulos", dijo el brasileño que, en todo caso, debe saber que está cedido, así que su periodo en Alemania tiene fecha de caducidad salvo que los bávaros paguen la opción de compra el próximo año, de 120 millones. Sería para él un muy buen síntoma, pues supondría que ha estado a la altura de lo que se esperaba de él antes de llegar al Barcelona.
"Cuando Hasan me preguntó si quería venir al Bayern no tuve duda alguna", explicó Coutinho, refiriéndose a Salihamdzic, directo deportivo de los muniqueses. "Agradezco al FC Barcelona por las negociaciones cordiales, lo mismo que a Philippe, a su familia y a su agente. Creo que con él nuestro equipo gana calidad", expresaba por su parte Rummenigge, presidente del Bayern.
El directivo asume que el precio no ha sido alto a tenor de cómo está el mercado. "8,5 millones de euros es un precio de amistad. Con pocos clubes tenemos relaciones tan estrechas como con el Barcelona que no quería bloquear la operación ante el hecho de que Philippe quería venir a Múnich a toda costa". Es cierto también que el Barcelona necesitaba sacar del equipo al brasileño para seguir optando a Neymar.
A Coutinho le faltaba una reflexión más, esa en la que tenía que valorar su paso por el Barcelona: "Sobre eso, no fue como esperaba, pero es el pasado, este es un nuevo club, uno importante. Espero estar aquí mucho tiempo". El Bayern se ha movido mucho estos días, con las llegadas de Coutinho y Perisic, pero no descarta volver a ir al mercado antes de que cierre, el 2 de septiembre, para terminar de apuntalar una plantilla que esta temporada ha perdido a Robben y a Ribery.