Muy lejos quedaron aquellos tiempos en los que el Atlante era conocido como El Equipo del Pueblo. Hoy en día, la franquicia de los Potros se encuentra abandonada en la Liga de Ascenso, registrando este torneo un triste promedio de 2400 espectadores por juego, que refleja que la afición perdió la fe en su equipo.
Pese a no tener la etiqueta de grande, es innegable que los Azulgranas son uno de los equipos más importantes de la historia del futbol mexicano, contando con un pasado que ha sido saqueado y traicionado en los últimos campeonatos, y más lejos que nunca de recuperar su puesto en el Máximo Circuito.
En 2007, la directiva en ese entonces encabezada por Alejandro Burillo notó una oportunidad interesante de negocio en Quintana Roo, dejando el Estadio Azteca y optando por mudarse al Andrés Quintana Roo, inmueble que acogió al equipo y mostró su ilusión por albergar semana a semana futbol de Primera División.
El romance se concretó rápidamente, pues los dirigidos por José Guadalupe Cruz se llevaron el título en su primer campeonato en Cancún, dejando en el camino a Pumas en la final del Apertura 2007. Parecía el nacimiento de una sólida plaza en la Liga MX con un equipo que conquistaría definitivamente a su afición. Lamentablemente, esto se desvaneció tiempo después.
El presente Apertura 2019 ha marcado una de las temporadas más tristes de los Potros de Hierro en la División de Plata, pues estar colocados en el segundo puesto de la tabla general no ha sido motivo suficiente para que sus fanáticos confíen, registrando un pobre promedio de 2400 asistentes por partido, el 12% de la capacidad de su inmueble.
Incluso, los habitantes locales ya muestran abiertamente su desprecio hacia el Atlante adoptando como nuevo club a Pioneros de Cancún, cuadro que juega en la Liga Premier y que sí ha llegado hasta los 4000 asistentes por partido.
Ya son distintas las ocasiones en las que se vincula a los Potros con una posible mudanza, existiendo como sedes alternativas la Ciudad de México, Acapulco y hasta Chiapas. ¿Logrará el glorioso Atlante establecer un proyecto competitivo, o terminarán siendo una de las legendarias franquicias que mueren en el olvido? Al parecer, en Cancún ya no son bienvenidos.
