REAL MADRID BARCELONA LALIGAGETTY IMAGES

Barça: 700 millones después, cambiar todo para que nada cambie

Ruben Uría Blog

Alineación del FC Barcelona en la final de Champions de Berlín en el año 2015: Ter Stegen; Dani Alves, Gerard Piqué, Mascherano, Jordi Alba; Rakitic, Sergio Busquets, Andrés Iniesta; Leo Messi, Luis Suárez y Neymar. Alineación del FC Barcelona en la semifinal de Champions en Anfield en el año 2019: Ter Stegen; Sergi Roberto, Piqué, Lenglet, Jordi Alba; Busquets, Rakitic, Arturo Vidal; Messi, Luis Suárez y Coutinho. Es decir, que cuatro temporadas después, hasta siete miembros del once titular de 2015 siguen siendo titulares en 2019. Eso, sin contar con los rumores que apuntan que Neymar Junior o hasta Dani Alves (¿?) podrían volver al Barcelona, con lo que entonces serían hasta nueve titulares de once posibles, después de casi un lustro.

¿Cómo es posible que en un club tan exigente como el Barça la base del once titular siga siendo inamovible y duradera? Pues es sencillo. Durante un lustro, por la dirección deportiva azulgrana han desfilado caras y criterios muy diferentes: desde Andoni Zubizarreta, hasta Robert Fernández y pasando por Eric Abidal hasta desembocar en el discutidísimo pero siempre respaldado Pep Segura. Y desde 2015 a 2019, las contrataciones del club no mienten. Después de los fichajes de Ter Stegen y Rakitic, los dos únicos fichajes que llegaron para aportar competencia y nivel al once titular, el saldo azulgrana es desolador. En la ‘era Baromeu’ los fichajes son los que son. Suplentes caros o en su defecto, apuestas aún más caras que han terminado por fracasar en su pelea por la titularidad. La lista es terrible para un club de la dimensión del Barcelona: Arda, Aleix Vidal, André Gomes, Alcácer, Umtiti, Digne, Cillesen, Denis Suarez, Lenglet, Marlon, Yerry Mina, Deulofeu, Semedo, Paulinho, Dembélé, Coutinho, Todibo, Boateng, Murillo, Vidal y Arthur. Esa es la lista de fichajes después de cuatro temporadas con Bartomeu como presidente. En 2015-16, el club gastó 51 milliones. En 2016-17, unos 125 millones. En 2017-18, una salvajada, 374 “kilos”. Y en el último curso, el gasto en fichajes fue de 129 millones. En total, el club ha gastado casi 700 millones de euros (679). Una circunstancia que ha logrado que lo que debía ser una evolución del once titular haya pasado a ser una involución preocupante.

Todo lo que se ha fichado, a precio de oro, no mejoraba lo que ya había. Después de cuatro años, en el Barça, los titulares siguen siendo titularísimos y los suplentes, suplentísimos. Y eso, en un club que debe hacer de la competencia interna su día a día, es terrible. Los años pasan, los titulares se envejecen y el Barça sigue sin dar los pasos necesarios para rejuvenecer su plantilla y fichar titulares de verdad. ¿Será este curso por fin? Cuatro cursos y casi 700 millones de euros después, los titulares del Barça son los que son y nadie ha sido capaz de fichar lo que el club necesita: auténtico nivel y calidad suprema. Y la culpa no es de los que están alargando el ciclo ganador del equipo, sino de los que no saben encontrarles competencia, ni reemplazo. Es decir, que los que mandan han seguido aplicando el principio más viejo del lugar: cambiar todo para que nada cambie. Luego, claro, se preguntan por qué. Y miran a Messi, que está harto de tener que cargar con toda la responsabilidad y lleva años pidiendo el mejor equipo posible, uno capaz de ganar en Europa

Rubén Uría

Anuncios