Más acusaciones, lo más probable. Athletic está intentando bloquear el acuerdo, apelando a LaLiga sobre las prácticas contables creativas del Barcelona, mientras que Laporta ha afirmado que su club no teme una auditoría de sus finanzas en respuesta. Un mural de Williams en Bilbao ha sido vandalizado dos veces, mientras esta saga continúa. Al menos Raphinha se está comportando con cierto nivel de gracia, extendiendo una cálida bienvenida a su posible nuevo compañero de equipo.