Los parisinos son, por supuesto, favoritos para ganar nuevamente el título francés, pero enfrentan presión de un equipo de Lyon que aún no ha concedido un gol. Una victoria sobre Lens, así como un fuerte comienzo en la Champions League contra el Atalanta, además de un enfrentamiento destacado contra el Marsella el 21 de septiembre, representa un período complicado en esta joven temporada. Tener a su entrenador ganador del triplete en la banca será crucial para los jugadores y los aficionados.