Por qué el PSG renuncia a Gigi Donnarumma, héroe en el título de la Champions League

Es importante recordar que el PSG apenas fue un modelo de consistencia durante su campaña en la Liga de Campeones. De hecho, su triunfo puede dividirse esencialmente en dos actos de calidad marcadamente contrastante.

Los hombres de Luis Enrique estaban al borde de una eliminación temprana vergonzosa después de caer 2-0 al comienzo del segundo tiempo de su encuentro decisivo con el Manchester City en el Parque de los Príncipes en enero, y se necesitó una remontada sensacional para cambiar el juego y su torneo completo.

En ese sentido, hubo esencialmente un antes y un después del City para el PSG, y la naturaleza Jekyll & Hyde de sus actuaciones fue posiblemente mejor personificada por Donnarumma.

Al igual que el PSG, él no convenció en absoluto durante las primeras rondas de la fase de liga y, junto con casi todos los demás en el once inicial de Luis Enrique, tuvo un desastre en la derrota 2-0 ante el Arsenal en el Emirates el 1 de octubre. Dada la pésima actuación general, el entrenador no estaba de humor para señalar a Donnarumma por permitir que el tiro libre de Bukayo Saka desde la banda derecha pasara por encima de él y entrara en el fondo de la red.

"Honestamente, no estoy aquí para señalar con el dedo por la derrota," dijo Luis Enrique a los periodistas. "Si hay alguien a quien culpar, soy yo. El otro equipo fue mejor con su presión y ganó más duelos. No puedes ganar un partido si no ganas ningún duelo. Merecimos perder."

Sin embargo, el error de juicio de Donnarumma solo llevó a un debate adicional sobre su estatus como el indiscutible número 1 del PSG.

Ya había rumores durante la primera temporada de Luis Enrique a cargo de que el español estaba menos que impresionado con las habilidades de distribución de Donnarumma y ya estaba solicitando un portero más cómodo con el balón en los pies.

Por supuesto, se negó a admitirlo públicamente. Después de una semana particularmente calamitosa para Donnarumma, que incluyó tres errores en tres partidos, Luis Enrique incluso asumió la culpa por la expulsión del internacional italiano contra Le Havre por una falta temeraria fuera del área.

"Gigio hizo lo que le pedí. Le pido al portero que cubra [el último tercio], así que si alguien es responsable, soy yo", insistió el entrenador. "La mayoría de las veces, va bien. Cuando no va bien, sin embargo, el problema recae en mí."

La sospecha seguía siendo que Donnarumma, a pesar de su brillantez bajo los palos, no era el encaje ideal para la filosofía futbolística de Luis Enrique. Como tantos entrenadores modernos, el excentrocampista de España quiere un portero que no solo pare tiros, sino que también inicie ataques, y aunque Donnarumma sobresale en lo primero, a veces lucha con lo segundo.

En consecuencia, la conversación sobre que el PSG haga un movimiento por el más seguro Lucas Chevalier, que comenzó el año pasado, nunca se apagó realmente, y el internacional francés ahora se espera que complete una transferencia de €40 millones (£35m/$46m) desde Lille en los próximos días.

La pregunta obvia ahora, entonces, es si la llegada inminente de Chevalier resultará en la salida inmediata de Donnarumma.

El contrato actual de Donnarumma expira el próximo verano, pero el PSG le ha ofrecido una extensión. El problema es que los términos del nuevo acuerdo no son del agrado ni del jugador ni de su agente, Enzo Raiola.

Esperaban una renovación que recompensara a Donnarumma por su papel clave en la histórica victoria en la Champions League, pero, según calciomercato.com, lo que les han ofrecido es un salario garantizado más pequeño de 7 millones de euros anuales y un potencial de 3 millones de euros en bonificaciones relacionadas con el rendimiento, que, incluso si se cumplen, solo igualarían el salario neto actual del portero (10 millones de euros al año).

Donnarumma ha declarado repetidamente que su "prioridad" es permanecer en París. Está asentado en la ciudad donde nació su hijo y firmaría felizmente un nuevo contrato, pero, crucialmente, solo si obtiene lo que siente que se ha ganado, que La Repubblica afirma es de 12 millones de euros al año.

Sin embargo, Le Parisien dice que el PSG le ha dado efectivamente a Donnarumma un ultimátum: o firma el contrato sobre la mesa o encuentra un nuevo club.

Aunque el mercado siempre es impredecible, parece improbable en este momento específico que Donnarumma acepte una oferta que considere inferior a lo que vale. Después de todo, no es que le falten pretendientes, especialmente con el PSG dispuesto a dejarlo ir por €40 millones para evitar perderlo por nada el próximo año y cubrir el costo de la firma de Chevalier.

A los 26 años, Donnarumma acaba de dar un recordatorio muy oportuno de sus impresionantes habilidades para detener disparos, y se dice que tanto el Manchester United como el Manchester City están monitoreando su situación de cerca (incluso a pesar de la adquisición de James Trafford por parte de este último), mientras que sin duda representaría una mejora significativa sobre Robert Sánchez para el Chelsea, que gasta libremente.

También es de conocimiento común que un Galatasaray muy ambicioso está buscando un portero de clase mundial, y luego está el habitual interés saudí en un jugador de tan alto perfil.

También se ha sugerido que el PSG estaría feliz de tener a Donnarumma y Chevalier compitiendo por un puesto titular la próxima temporada, y el italiano se encontró en una posición similar con Keylor Navas cuando llegó al Parc des Princes. Sin embargo, es difícil imaginar que un escenario así atraiga a Donnarumma en un año de Copa del Mundo, especialmente porque Chevalier claramente sería el favorito para ganar este duelo en particular.

La mera contratación del joven de 23 años es una evidencia más del impulso del PSG para insertar la mayor cantidad posible de talentosos jugadores jóvenes franceses en su equipo, y no se puede negar el hecho de que Chevalier es mucho mejor con el balón que Donnarumma. Además de mantener siete porterías a cero más que el italiano en la Ligue 1 la temporada pasada (11-4) y contar con un mejor porcentaje de paradas (71.65-66.22), Chevalier también completó muchos más pases largos (158-62) y 'lanzamientos' (61-16), que son definidos por Opta como 'balones altos en espacio o un área para que los jugadores persigan o compitan por el balón'.

Hay muchas posibilidades, entonces, de que a menos que se pueda encontrar un compromiso, Donnarumma y el PSG se separen este verano. Su valoración no ha estado tan alta desde la Eurocopa hace cuatro años, lo que significa que tendría poca dificultad en convencer a otro equipo de élite para que le pague lo que quiere, mientras que el PSG ya ha alineado un reemplazo para un jugador con menos de 12 meses en su contrato.

Puede que haya sido el MVP del PSG en la Champions League de la temporada pasada, pero la partida de Donnarumma ahora tiene sentido tanto monetario como deportivo.