Fue uno de los goles más fáciles que Haaland ha marcado, empujando la pelota a una red vacía en el minuto 60 después de ser asistido por el futuro jugador del Liverpool, Takumi Minamino. La alegría de igualar contra el Liverpool no duró mucho, ya que Mohamed Salah puso el marcador 4-3 a favor de los Reds nueve minutos después. Aún así, su primer gol en suelo inglés sirvió para darle más reconocimiento a Haaland al comienzo de su ascenso astronómico para convertirse en el mejor delantero centro del mundo.
Y sin embargo, ese simple gol fue el festín antes de la hambruna - por los ridículamente altos estándares de Haaland - contra el Liverpool. En ocho partidos contra los Reds, Haaland solo ha marcado tres veces, la menor cantidad de goles que ha anotado contra un equipo al que ha enfrentado al menos en ocho ocasiones.
Haaland ha marcado ocho veces contra el Manchester United, cinco veces contra el Arsenal y cuatro veces contra tanto el Chelsea como el Tottenham. Esos cuatro equipos están entre los 35 equipos contra los cuales Haaland ha anotado cuatro o más goles a lo largo de su carrera. En ese contexto, el Liverpool, contra quien ha anotado dos goles en seis juegos para el City con solo un gol en la Premier League, es el equipo 'gafe' de Haaland.
Pero el partido del domingo contra los campeones, que inicia una semana crucial para la máquina goleadora noruega, es la ocasión perfecta para acabar con su maldición contra el Liverpool y dar a los Reds el mismo trato despiadado que ha dispensado a casi todos los demás equipos.










