Kroos y sus estadísticas son de otro planeta: Alemania golea a Escocia al ritmo de sus pases

Unos minutos de partido bastaron para entender por qué Nagelsmann insistió tanto en el regreso de Kroos a la selección.

Un regreso que no fue muy bien tomado por quienes le acusaron de querer hacerse un hueco en la plantilla para participar en un torneo que otros habían merecido jugar.

Bueno, Kroos literalmente tomó al equipo de la mano, dictando efectivamente su ritmo, iniciando todas las acciones ofensivas y controlando eficazmente cada balón jugado por Alemania.

Hay un dato que más que cualquier otro cuenta el impacto que Kroos tuvo en el partido: en la primera mitad completó 55 pases de 55 intentos.

Atención, no son pases horizontales para servir al compañero más cercano ralentizando la maniobra de su equipo, sino auténticas joyas.

De un pase suyo de precisión quirúrgica nació la acción que llevó al 1-0, mientras que en la ocasión del gol que duplicó la ventaja fue él quien la inició encontrando a Gundogan entre líneas.

Dentro de los 80 minutos jugados a niveles excepcionales, Kroos se permitió un solo pequeño error.

Un pequeño error traducido en una verticalización incorrecta que hizo desaparecer la posibilidad de terminar su partido con un 100% de precisión.

Sí, porque al momento de salir del campo, las estadísticas mostraron 101 pases completados de 102 intentados.

Los seguidores del Bayern nunca le han perdonado completamente la decisión de abandonar Múnich en 2014 para mudarse al Real Madrid, pero en el momento de su sustitución, el que una vez fue su estadio, el Allianz Arena, le rindió un homenaje estremecedor.

De hecho, los aficionados alemanes, mientras Kroos abandonaba el campo, se pusieron de pie para brindarle la merecida ovación. Algo inevitable para un jugador que, desde el punto de vista de la calidad, ha demostrado estar un paso por delante de todos.