El futuro de Alemania es ahora: los jóvenes Jamal Musiala y Florian Wirtz pueden poner fin a la mala racha del anfitrión de la Eurocopa 2024

Cuando Alemania ganó el Mundial de 2014, parecía que iba a iniciar un período de éxito para la selección nacional. El entonces entrenador Joachim Low había armado un equipo impresionante y digno de ver, construido alrededor de Mesut Ozil, Thomas Müller y Toni Kroos, con el mejor portero del mundo, Manuel Neuer, manteniendo el equipo firme en la defensa. La mayor parte del equipo estaba en su mejor momento o en camino hacia él. Aquí había una unidad destinada a dominar el fútbol europeo durante años.

Por supuesto, no funcionó así. Después de llegar a las semifinales de la Eurocopa 2016, el equipo se desplomó. Fueron eliminados en la fase de grupos del Mundial 2018, en los octavos de final de la Eurocopa 2020 retrasada por la pandemia, y se estrellaron en la fase de grupos en Qatar hace 18 meses.

Pero quizás aún peor fue la renuencia de los que estaban en el poder a cambiar las cosas. Low se quedó en un torneo de más, mientras que Flick desplegó en gran medida el mismo grupo de veteranos que su predecesor, incluso cuando todos estaban fuera de forma. Los jóvenes talentos fueron desatendidos, mientras que los veteranos se abrían camino hacia sucesivas decepciones en torneos.

Flick acertó en algo. En Qatar, el entrenador tuvo la previsión de incorporar a Musiala, de 19 años, al equipo, desplegando al centrocampista ofensivo del Bayern en el lado izquierdo de una formación 4-2-3-1. Y aunque Alemania no tuvo un buen desempeño durante la mayor parte del torneo, el juvenil fue una chispa brillante poco común. De hecho, fue el único aspecto positivo que la prensa alemana encontró en su mordaz evaluación del equipo, ya que el ex entrenador Jürgen Klinsmann señaló: "Tenemos un niño prodigio, no hay duda al respecto, en términos de rendimiento en Musiala: es un jugador excepcional, excepcional".

Naglesmann ha seguido apoyándose en el joven. El ex entrenador del Bayern ha dado paso a una generación más vieja y ha convertido a Musiala en el punto focal de su equipo. En estos días, el maestro creativo del Bayern juega por la derecha, con Ilkay Gundogan jugando un papel más restringido en el centro.

Para Alemania, el deber de Musiala es marcar el ritmo. A veces regatea, otras veces circula. Cuando el joven de 21 años tiene el balón, todo se ralentiza mientras se abre paso entre los jugadores y se cuela por huecos que en realidad no existen.

Su actuación contra una Francia con toda su fuerza en marzo resumió mejor sus habilidades. El futbolista completó la mayor cantidad de pases de todos los integrantes del cuarteto atacante de Alemania, regateó con éxito a tres oponentes, tocó el balón 81 veces y asistió al segundo gol de su equipo en una victoria por 2-0 sobre los favoritos de la Eurocopa 2024.

Wirtz tal vez hubiera compartido equipo con Musiala en Qatar si su ascenso al estrellato no se hubiera visto retrasado por una lesión. Fue el debutante más joven de la historia del Bayer Leverkusen cuando saltó al campo con solo 17 años y 16 días a principios de 2020 y, poco más de dos semanas después, se convirtió en el goleador más joven de la Bundesliga. Hizo su debut con Alemania a los 18 años y en 2021 se suponía que estaría en la ruta del resto de la liga hacia el Bayern.

Pero las cosas cambiaron cuando se rompió el ligamento cruzado anterior en la primavera de 2022. Su progreso se estancó y, aunque perdió la oportunidad de ir a su primera Copa del Mundo, puede que haya resultado ser una especie de bendición disfrazada. Cuando regresó a la acción, Xabi Alonso era el entrenador del Leverkusen, y el español ha llevado el juego del mediocampista ofensivo a otro nivel.

Wirtz se ha convertido en una presencia más directa bajo el mando de Alonso, jugando por el interior izquierdo en una formación 3-4-2-1. Es un experto en hacer girar a su hombre y correr hacia las defensas, y tiene un gran sentido del regate para encontrar huecos. Su total de 18 goles y 20 asistencias en todas las competiciones en la temporada lo colocan en la conversación por el Balón de Oro.

Así que mientras Musiala ralentiza el juego de Alemania, Wirtz puede acelerarlo. Juntándose los dos (con Gundogan proporcionando apoyo entre ellos), la combinación es potencialmente letal.

La influencia de Nagelsmann en este aspecto es innegable. El alemán ha demostrado que tiene lo necesario para que se hable de él entre los mejores entrenadores y quizás tuvo la mala suerte de ser despedido por el Bayern en marzo de 2023. Ahora, parece haber encontrado el equipo perfecto con el que puede reconstruir su reputación.

Nagelsmann ha configurado a Alemania como si fuera un equipo de club, pidiéndoles que jueguen su característico estilo rápido y de gegenpressing, apoyándose en tres centrocampistas ofensivos y un falso 9 poco ortodoxo para marcar goles.

Ese hombre en el medio, Kai Havertz, ciertamente tiene sus detractores, ya que el delantero del Arsenal se ha hecho famoso por su capacidad para fallar grandes oportunidades. Pero hacia el final de la temporada 2023-24, comenzó a encontrar el gol y hubo atisbos de cómo podría funcionar como un punto focal de ataque ideal. Podría trasladarse también a Alemania.

Cuando Havertz se desplaza, se abren espacios y Musiala y Wirtz tienen oportunidades de hacer su magia. Esos elementos inteligentes sin balón en su juego no le restarán valor a su cuestionable récord goleador, ni tampoco disiparán los temores de que Alemania probablemente necesite una presencia más incisiva en otras partes del campo para meter el balón en la red. Pero Havertz permite que los dos mejores talentos ofensivos de Alemania hagan lo que mejor saben hacer.

Quizás el mayor cambio que ha hecho Nagelsmann se debe a su capacidad de persuasión, ya que fue capaz de convencer a Toni Kroos de que saliera de su retiro internacional durante los meses de invierno. El centrocampista dejó la selección nacional hace tres años después de asumir una gran parte de la culpa por la decepcionante campaña de su equipo en la Eurocopa 2020. En ese momento, las críticas fueron quizás un poco injustas, pero sin duda era cierto que el mediocampo alemán necesitaba una inyección de juventud, independientemente de las contribuciones de Kroos a lo largo de los años.

Sin embargo, Nagelsmann convenció al veterano para que regresara a la selección nacional, ya que le vendió a la estrella del Real Madrid un sistema que colocaría corredores a su alrededor y permitiría a Kroos mostrar su excelente capacidad de pases desde la profundidad.

Las primeras señales han sido prometedoras, ya que Toni ha impresionado en cada uno de sus tres partidos desde su regreso, cada uno de los cuales terminó con Alemania como ganador. Su presencia dominante también fue el catalizador para que Nagelsmann confiara en Musiala y Wirtz para jugar en el mismo equipo y puede que se recuerde en el pasado como la decisión que cambió el destino de Alemania en la Eurocopa a mediados de julio.

"Es un genio", dijo Musiala a The Athletic sobre el jugador de 34 años que se retirará del fútbol por completo después de la Eurocopa. "Solo con un par de sesiones de entrenamiento y los partidos que hemos jugado (para Alemania), y los partidos que jugamos (para el Bayern) contra el Madrid, se ve la calidad que tiene. Los pases que da... Es muy divertido estar en el campo con él porque puede darme el balón exactamente donde quiero, donde puedo girarme, para hacer carreras por detrás, así que siempre voy a ser una opción para él".

Por supuesto, muchos equipos han llegado a los torneos internacionales con grandes proyectos y planes herméticos, que luego se ven trastocados una vez que comienzan los partidos. Dicho esto, hay muy pocos resultados potenciales para Alemania en los que tanto Musiala como Wirtz no estén a la altura, tal es su calidad.

Nagelsmann ha construido un equipo que puede dar servicio a sus dos talentos más creativos en las zonas adecuadas del campo, y con ambos jugadores siendo objeto de rumores de transferencias de cara al mercado de verano, habrá muchos directores deportivos en toda Europa que pensarán que podrían hacer lo mismo en un futuro cercano.

"Bromeamos que pensamos que sería genial jugar juntos en un club en algún momento", dijo Wirtz cuando ambos subieron al podio de la conferencia de prensa el miércoles. "Ahora ambos estamos felices en nuestros clubes".

Agregó: "Ambos queremos ganar el título y sabemos que nos necesitamos mutuamente para eso. Tenemos muchas ideas en nuestro juego y siempre estamos buscando soluciones... No sería saludable si intentáramos superarnos mutuamente. Personalmente, no me importa quién marque más goles".

Si Alemania consigue la gloria de la Eurocopa en Berlín dentro de un mes, ni a Nagelsmann ni a los hinchas del país les importará quién marque los goles. Sin embargo, se necesitaría alguien valiente para predecir que no participarán Musiala ni Wirtz.