Con los Herons superando a un contendiente esperado como los Seattle Sounders el martes, se esperaba que D.C. United - 14º en la Conferencia Este - fuera una prueba más fácil en casa. Sin embargo, con una semana de descanso, el equipo de René Weiler salió compacto y organizado, negándole a Miami los espacios en los que prefieren jugar.
Descomponer a un United terco requirió creatividad y, por supuesto, esta vino de Messi. En el minuto 35, vio a Tadeo Allende avanzando a 35 yardas delante de él y entregó un pase largo preciso. El jugador de 27 años finalizó con facilidad para el 1-0. Para Messi, cuya leyenda se construyó en el tiki-taka con pases cortos e intrincados, fue atípico, pero efectivo dada la formación de United.
D.C. respondió temprano en la segunda mitad ya que el delantero belga Christian Benteke anotó un cabezazo en el minuto 52 y lo marcó con una celebración al estilo LeBron. Continuaron presionando, pero Miami encontró su respuesta en el minuto 66. Jordi Alba pasó el balón a Messi en una combinación clásica, y el argentino lo colocó más allá de Luis Barraza. Miami casi lo selló minutos después cuando se otorgó un penalti después de que Barraza derribara al suplente Mateo Silvetti, pero el adolescente - al que Messi le cedió el penalti - lanzó al larguero.
Los Herons también escaparon de un susto cuando Baltasar Rodríguez fue amonestado justo fuera del área, evitando por poco una llamada de penalti. Y en los últimos 10 minutos, Messi deslumbró una vez más. Superó a tres defensores, falló su primer tiro, luego recuperó el balón de Sergio Busquets - el tercero de la noche para Miami. D.C. conseguiría otro gol, de Jacob Murrell, pero llegó demasiado tarde en el último minuto del tiempo extra.
Con la victoria, el equipo de Javier Mascherano se mantiene quinto en el Este, pero con tres juegos menos que el Union, que está ocho puntos por delante.
GOAL califica a los jugadores del Inter Miami desde el Chase Stadium...






