Cade Cowell busca renacer en la Leagues Cup con Chivas y volver al USMNT

El 2025 de Cowell arrancó con una racha de 21 partidos sin anotar para Chivas. Entraba y salía del once titular, y las críticas hacia sus actuaciones llegaban desde todos los rincones de México. A sus 21 años, el joven no estaba cumpliendo con las expectativas que un club como Chivas demanda.

En abril, Jared Borgetti, exestrella de Chivas y leyenda del fútbol mexicano, señaló que la responsabilidad podría no ser solo de Cowell, mencionando la cultura tóxica que rodea al club y que dificulta el éxito de los jóvenes en la franquicia de la Liga MX.

“Muy pocos jugadores se han destacado en Chivas en los últimos años,” afirmó Borgetti. “El rendimiento general del equipo no ha permitido que ningún futbolista realmente brille o cumpla con las expectativas. Los entrenadores y el estilo de juego no han sido los ideales para sacar el máximo provecho al potencial del plantel.”

Añadió: “La presión de jugar en un equipo en crisis ha hecho que los jugadores tengan dificultades para disfrutar el fútbol. Por eso hemos visto a futbolistas salir de Chivas y luego prosperar en otros clubes, como Alexis Vega y Jesús Angulo. Lo mismo está pasando con Cowell.”

Esto contrasta con lo que mostró en el Apertura 2024, cuando tuvo meses destacados, anotando cinco goles y dando dos asistencias en 12 partidos. Probablemente por eso fue llamado a los campamentos del USMNT en septiembre y noviembre.

Sin embargo, en el Clausura 2025, sus minutos en cancha disminuyeron considerablemente y su rendimiento decayó. Borgetti señaló también factores externos, como su condición de binacional entre México y Estados Unidos, y su decisión de representar al USMNT.

“Se unió a un equipo lleno de jugadores nacidos en México, y siendo alguien con ascendencia mexicana pero con un apellido no mexicano, naturalmente llama más la atención,” explicó Borgetti. “Además, se le juzga con estándares más altos porque ocupa un lugar que podría haber sido para un jugador con doble ascendencia mexicana.”

Ahora que Cowell ya tiene su primer gol del año, podría ser una señal de que está recuperando su mejor forma justo en un momento clave para su club.

El USMNT, mientras tanto, ciertamente podría aprovechar a un jugador con las herramientas de Cowell; solo necesita que él demuestre que pertenece.

Bajo la dirección de Mauricio Pochettino, Estados Unidos tuvo actuaciones por debajo de lo esperado en competencias consecutivas en 2025, terminando cuarto en la Nations League y segundo en la Gold Cup. En ambos torneos quedó en evidencia la falta de profundidad y de jugadores capaces de cambiar el juego por las bandas.

En la semifinal de la Nations League en marzo, el USMNT perdió contra Panamá mientras Weston McKennie y Yunus Musah rotaban de manera ineficaz en roles de mediocampo ancho. El banco ofrecía pocas opciones reales de extremos: solo Diego Luna, sin minutos en ese torneo, y Gio Reyna, un jugador más natural en el centro del campo.

Luna destacó en el partido por el tercer puesto contra Canadá, con una asistencia desde una posición amplia, pero el resto del ataque, incluidos Christian Pulisic (jugando como número 10) y Tim Weah, no lograron generar inspiración.

En ambos encuentros, al USMNT le faltó un extremo puro, pegado a la línea, que pudiera cambiar el curso del juego desde el banco, una situación que se repitió en la Gold Cup.

Las decisiones de convocatoria de Pochettino merecen análisis, pero fuera de Luna, no había opciones confiables en las bandas. Quinn Sullivan estuvo en el plantel, pero solo jugó brevemente tras una mala actuación en un amistoso contra Suiza. Pulisic y Weah estuvieron ausentes, Haji Wright se lesionó temprano en el campamento, y jugadores como Alex Zendejas, Griffin Yow y Cowell quedaron fuera.

La cantera de extremos del USMNT no está en crisis, pero está en un punto en el que, fuera de Luna, nadie da un paso adelante para desafiar a Weah y Pulisic por minutos. Con la posibilidad de incorporar nuevos jugadores, es ahora o nunca para que Cowell haga su reclamo.

Al equipo le falta un verdadero factor X desde el banco: alguien que aporte velocidad, físico, tamaño y amenaza goleadora en las bandas. El único, además de Cowell, que cumple ese perfil es Wright, pero él está fuera por una lesión en el tendón de Aquiles sin fecha clara de regreso.

Para Cowell, la oportunidad está al alcance. Ya acumula 11 partidos con un gol y una asistencia, y este es el momento de construir sobre esa base.

En tres temporadas con Chivas, Cowell suma 11 goles y cuatro asistencias en 51 partidos. Principalmente extremo izquierdo, su perfil puede ser un activo para el USMNT, pero solo si empieza a producir de forma consistente a nivel de club.

En la Leagues Cup 2024, Cowell tuvo cuatro apariciones con Chivas y anotó un gol clave: un tanto de empate en tiempo de compensación contra LA Galaxy que forzó un empate 2-2 y llevó el partido a penales. Cowell convirtió su disparo, aunque Chivas finalmente cayó 5-4 en la tanda. Aun así, el joven destacó en un momento crucial para el equipo mexicano.

Este año, Chivas contará nuevamente con él para enfrentar un grupo complicado en el torneo.

Comenzarán contra los subcampeones de la MLS Cup, New York Red Bulls, seguidos por el Charlotte FC de Wilfried Zaha, quien llega en gran forma, y el FC Cincinnati liderado por Evander. Cada rival cuenta con internacionales actuales de EE. UU.: Miles Robinson con Cincinnati, Tim Ream con Charlotte, mientras que los Red Bulls llegan tras una reciente aparición en la MLS Cup.

Si Cowell logra influir en estos partidos de alto perfil, podría regresar al radar del USMNT. Además, su familiaridad con la MLS —donde inició su carrera con los San Jose Earthquakes— será una ventaja.

De forma similar a Benjamin Cremaschi, quien se consolidó como pieza clave en Inter Miami tras su destacada actuación en la Leagues Cup 2023, Cowell podría seguir sus pasos. Y como ha demostrado Pochettino, no importa dónde juegues, sino que estés activo y en buen nivel. Todos estos factores podrían jugar a su favor.

El USMNT tiene solo cinco ventanas internacionales y 10 partidos potenciales restantes antes del inicio de la Copa del Mundo. No hay margen de error dentro ni fuera del campo, y lo mismo aplica para Pochettino al seleccionar a sus jugadores. A comienzos del año calendario, es probable que el entrenador argentino ya tenga definido su grupo, y la ventana internacional de marzo será la última oportunidad para consolidar la plantilla que competirá en el Mundial del próximo verano.

Para Cowell, esto significa que, de forma realista, solo le quedan tres ventanas para ganarse un lugar: septiembre, octubre y noviembre. Después de eso, será muy complicado que un jugador que no haya participado en esas tres ventanas de otoño pueda integrarse al equipo.

No hay duda: este verano es crucial para el extremo de Chivas. Ahora es el momento de defender su lugar.