EDITORIAL
"La etapa en el Barcelona está cerca de acabarse". Es la frase que ha hecho saltar la alarma en el club azulgrana. Sorprende porque su autor, Javier Mascherano, tiene contrato en vigor hasta junio de 2019 y el equipo atraviesa cierta incertidumbre en el eje de la zaga, con Samuel Umtiti en el dique seco los próximos dos meses y el 'jefecito' perdiendo peso. De hecho, el pasado sábado Catalunya Ràdio adelantó que el argentino ya ha trasladado a la cúpula deportiva azulgrana que incluso se plantea abandonar el Camp Nou durante el mercado de invierno, una información que también confirma Mundo Deportivo a través de fuentes del club, que no obstante remarcan que Mascherano informó a la junta antes de que el francés cayera lesionado.
Naturalmente, el Barcelona tiene la sartén por el mango y puede rechazar la posibilidad que plantea el jugador, quien en el pasado ya había comentado que "después de tanto tiempo uno a veces se plantea si puede seguir a este nivel" para luego ampliar su contrato hasta 2019, tal y como tiene firmado en estos momentos. Difícilmente va a cumplirlo. Con treinta y tres años y el Mundial de Rúsia a la vuelta de la esquina, el 'jefecito' quiere seguir siendo importante en lo que puede ser el ocaso de su carrera, y ello incluye firmar un último gran contrato profesional y ejercer como el jugador importante que es en la 'albiceleste' el próximo verano.
La nueva vida de Mascherano: "le afecta la suplencia pero debe estar tranquilo"
Interpelado por el presente y el futuro a corto plazo de Mascherano, el entrenador del primer equipo, Ernesto Valverde, fue muy claro. "De Mascherano no me preocupa nada más que su recuperación" repitió un par de veces para señalar que "es un jugador nuestro, estamos contentos con él, contamos con él, esperamos que se recupere pronto y ha demostrado durante mucho tiempo que es un jugador muy comprometido". De hecho, su compromiso siempre estuvo fuera de toda duda, tanto por sus actuaciones dentro del terreno de juego como por su sinceridad ante los micrófonos y probablemente por ese motivo sus compañeros le eligieran como cuarto capitán por delante de Gerard Piqué hace un año y medio.
Hasta la fecha, tanto la dirección deportiva como técnica han coincidido en reforzar el ataque. "No necesitamos más centrales" ha repetido Valverde en ocasiones, asegurando que "con los cuatro centrales que tenemos es suficiente" para afrontar la temporada con la exigencia de "ganarlo todo". De momento dos de estos cuatro defensas no estarán disponibles ante el Sporting. Lesionado desde el pasado 14 de noviembre durante la concentración de la Selección argentina, esta misma semana vence el plazo de cuatro semanas de recuperación que se le diagnosticaron a Mascherano, así que podría reaparecer el próximo domingo a domicilio del Villarreal. Quien sabe si puede ser el inicio del fin tras siete temporadas y media en el Barcelona.
