El Real Madrid recibe este sábado al Levante en un partido clave para las aspiraciones del actual proyecto blanco. Después de tres derrotas en los últimos cuatro partidos (incluido uno de Champions League), no hay más margen de tiempo para una recuperación que debe ser inmediata, según entienden en la Casa Blanca. Y afortunadamente para los intereses merengues, Julen Lopetegui va a poder contar con nuevos efectivos ante el cuadro granota, con jugadores que van abandonando la enfermería progresivamente después de “una serie de infortunios”, como lo calificó el propio técnico madridista.
¿Cuándo fue la última lesión de Bale?
Uno de esos infortunios se corresponde con la figura de Isco Alarcón, que después de haber tenido que parar súbitamente por una apendicitis que le llevó al quirófano, ha comenzado a entrenar esta semana con el resto del equipo y apunta al partido ante el Levante, aunque sean unos minutos mientras va cogiendo su pico de forma ideal. Otro es Marcelo, quien lleva ya más tiempo ejercitándose con normalidad después de la lesión muscular en el sóleo que sufrió en el Sánchez Pizjuán y se espera que también pueda jugar el sábado. Por su parte, Karim Benzema tuvo que retirarse al descanso del enfrentamiento ante el Alavés, pero con unas mínimas molestias en los isquiotibiales de su pierna derecha que apenas le han tenido apartado una semana. Ya ha empezado a entrenar con el grupo y también se espera que pueda estar disponible ante el Levante. Y por último está Gareth Bale, quien merece un capítulo aparte.
El galés se retiró al descanso del derbi el pasado sábado 29 con molestias en el abductor derecho, y se perdió el partido de Champions en Moscú por precaución pese a que las pruebas médicas no le detectaron lesión alguna. Así las cosas, regresó ante el Alavés al siguiente partido -hace diez días-, pero de igual manera volvió a sentirse incómodo y pidió el cambio antes del pitido final. Entonces, tras unas primeras exploraciones en el mismo vestuario de Mendizorroza, desde el cuerpo médico del Real Madrid se entendió que Bale no había sufrido lesión, sino que era normal que sufriera de cierta “fatiga muscular” al haber tenido que parar y sólo haber realizado un entrenamiento antes de enfrentarse al Alavés. Así las cosas, el potente atacante se incorporó a la concentración con la selección de Gales durante el parón internacional. Pero pese a las ganas de medirse a la Selección Española, el sentido común llevó a Gareth a descansar, reposar y trabajar duro para recuperar sus mejores sensaciones, siempre desde la precaución de no forzar un abductor derecho que le llevaba incomodando una semana.
Así las cosas, Bale regresó antes de tiempo a Madrid –antes del segundo partido de Gales durante el parón FIFA- para seguir ejercitándose pero ya desde la Ciudad Deportiva de Valdebebas, bajo la supervisión de los técnicos y preparadores del Real Madrid. “Trabajando duro. No puedo esperar para volver a los terrenos de juego con los chicos”, escribía Gareth en sus redes sociales este mismo martes. Y al final ha conseguido volver a jugar ‘con los chicos’… aunque sea de momento en un entrenamiento. El de este jueves, concretamente, que ha sido el primero que ha completado con el resto del grupo, apenas 48 horas antes de que el Levante pise el Santiago Bernabéu. Lo que le deja en buena posición para el partido de La Liga este sábado. Era cuestión de sensaciones personales, según ha podido saber Goal. Bale ha avanzado a paso lento pero firme hasta encontrarse al 110% de su mejor forma. Siempre tuvo claro que no le valdría menos. Y está cada vez más cerca de llegar a ese punto, como muestra el hecho de que haya entrenado ya este jueves con normalidad. El Clásico asoma tras la esquina y bajo ningún concepto se quería dar ni un paso en falso. Afortunadamente para Lopetegui, el regreso de los Isco, Marcelo, Benzema y ahora también Bale amortiguan ya en gran medida esa gran fuga de talento de las últimas fechas. Sólo queda Dani Carvajal en la enfermería merengue.
