Estos son los escándalos más recordados de los técnicos en el Fútbol Profesional Colombiano.
Mario Vanemerak: Rompió la puerta del camerino de visitantes y causó varios estragos al interior de este tras la derrota 2-0 en Pasto en 2008. Esto le costó tres meses de sanción y 6.000 dólares de multa.
Carlos Valderrama: El astro histórico del fútbol colombiano tuvo un corta carrera como estratega. En 2007 al mando del Junior de Barranquilla, al ‘Pibe’ se le saltó la rabia en un juego contra el América de Cali cuando Oscar Julián Ruiz le pitó un penal a favor de los escarlatas. El samario le mostró un billete de $50.000 pesos y lo tildó de “rata”.
Siempre el ‘Pecoso’: En la Copa Libertadores del 2003 al mando del América de Cali, Castro se enfrentó con uno de los jugadores de River Plate en un duelo por los cuartos de final. El partido iba 3-1 a su favor pero el equipo argentino arremetía buscando el descuento, fue en ese momento que el explosivo DT se le ocurrió halarle el pelo a Claudio Husaín.
Hernán Darío Gómez: Sin lugar a dudas una de los más icónicos escándalos de técnicos en Colombia. En 2011, cuando el ‘Bolillo’ estaba de nuevo al frente de la Tricolor, golpeó brutalmente a una mujer al salir de un bar en la capital. Este acto le costó el puesto por las fuertes críticas. Él mismo renunció.
Eduardo Pimentel: Otro de los fanáticos de las peleas, las ofensas y las polémicas en general. Del propietario del Boyacá Chicó hay varias que contar. Una de ellas fue un altercado con Alexis García en un duelo con Equidad en Techo. Desde la tribuna ofendió el técnico asegurador y luego lo increpó en los camerinos. Pimentel también es recordado por sus tuits incendiarios contra el que se le interponga en el camino.
Javier Torrente: Otra de las polémicas de técnicos en el FPC lo protagonizó este estratega argentino. Muy preparado él, de la escuela de Bielsa, dicen, pero su comportamiento salió a flote al hacer una pataleta tremenda, golpeando incluso al cuarto árbitro. La Dimayor lo sancionó por mes y medio y una dura multa económica.
La máxima de Pimentel: El entonces asistente técnico del Chicó insultó y le pegó un puño en el estómago al juez central Luis Sánchez, luego del partido en el que su equipo empató 1-1 con Atlético Nacional en Tunja. El Comité Disciplinario de la Dimayor castigó severamente al asistente técnico y dirigente ‘ajedrezado’ por agredir al juez: doce (12) meses de suspensión con la prohibición expresa de ingreso a los estadios y una multa de $34.472.700.
La última del Pecoso: En su paso por el América de Cali, el regio caracter del entrenador lo llevó a cruzar insultos con un miembro de la afición, todo quedó captado en cámara.
Ni Gamero se ha escapado: El estrés de la competencia internacional llevó al entrenador del Deportes Tolima a darle una cachetada a uno de sus asistentes cuando las cosas no salían bien en un encuentro ante Argentinos Juniors.
Juan Carlos Osorio no se pudo contener ante una expulsión: En su regreso al fútbol colombiano, el entrenador de Atlético Nacional sintió el rigor del comité disciplinario, luego de ser sancionado duramente por un incidente con el juez central del encuentro que dirigía el partido que su equipo le ganó a Independiente Santa Fe por la Copa Águila.
Julio Comesaña por partida doble: El uruguayo perdió los papeles luego de la derrota de Junior de Barranquilla ante el Deportivo Cali por la Copa Águila. Luego de saludarse, Comesaña agredió a Lucas Pusineri , técnico azucarero y luego a los jugadores Matías Cabrera y Juan Dinenno. El incidente trajo a la memoria un hecho similar con Jorge Luis Pinto en 2006, cuando Comesaña estaba al frente del Real Cartagena y Pinto en el Cúcuta Deportivo. Ambos terminaron sancionados por la Dimayor y se espera que el ente rector del fútbol colombiano tome determinaciones sobre el accionar reciente de Julio Avelino.
La más reciente de Pimentel: El dirigente perdió totalmente los estribos al término del partido que su equipo, el Boyacá Chicó, igualó a dos tantos ante Alianza Petrolera en La Independencia. La protesta surgió por el empate de los petroleros en el último minuto de reposición, que privó al Ajedrezado de tres puntos importantes para evitar el descenso. Pimentel ingresó a la cancha y persiguió al juez Luis Sánchez para luego desatarse en su cuenta de Twitter con varios mensajes indicando que hubo trampa y que el fútbol colombiano está dominado por las apuestas.
