Pocos equipos del futbol mexicano se han cambiado tanto como el Atlante. Ahora sale de Cancún para trasladarse por enésima vez a la Ciudad de México, una constante a lo largo de su historia tanto en la Primera como en la Segunda División.
No es ni la primera o segunda ni seguramente la última ocasión en la que los Potros de Hierro van a experimentar algo similar. A partir del torneo Apertura 2020 de la Liga de Expansión MX su localía corre a cuenta en el Estadio Azul, un escenario que no le resulta desconocido en su pasado.
A continuación, en Goal revisamos el largo historial de mudanzas de ciudad e inmuebles del equipo.
¿EN QUÉ CIUDADES Y ESTADOS HA JUGADO?
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Son muchos. Eso sí, cabe recordar que vuelve a sus raíces: la Ciudad de México, lugar en el que nació un 8 de diciembre de 1918. En ese entonces tenía otro nombre, el de Sinaloa porque lo fundaron en la esquina de dicha calle y la de Sonora por el líder obrero Trinidad Martínez, su hermano Refugio y Agustín Pérez.
Posteriormente, en 1919, lo modificaron a Lusitania. Luego, en 1920, a U-53 como homenaje a un submarino alemán de la Primera Guerra Mundial. Finalmente, en 1921, le denominaron Atlántico , en relación con el Océano Atlántico. No obstante, la gente le empezó a decir Atlante.
De ahí comenzó su peregrinaje. Salió de la CDMX por primera ocasión a Querétaro para la temporada 1989-90, en la cual descendió y en Segunda retornó a la capital. La segunda consistió del otrora DF a Nezahualcóyotl, Estado de México, en el Apertura 2002.
De Neza echó reversa a la CDMX en el Clausura 2004. De allí se marchó a Quintana Roo para el Apertura 2007, coincidiendo con la obtención de su tercera Liga, hasta el Clausura 2020.
Desde el principio, todavía en el amateurismo, se les identificó como "el equipo del pueblo" debido a su origen humilde y con la clase trabajadora, por lo que tenía bastantes seguidores. Incluso en la década de los 30 protagonizó el primer clásico del balompié nacional contra el Necaxa, una rivalidad de contendientes por el título que se fue apagando paulatinamente.
¿EN QUÉ ESTADIOS HA JUGADO ATLANTE?
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Siempre adoleció de uno propio. En sus albores jugaba en los campos públicos de la colonia Condesa en la capital. A raíz de su ingreso a la Liga en la temporada 1927-28 alternó entre los Parques Alianza, España, Necaxa y Asturias, siendo este último el más regular y en el que levanta la copa en 1946-47.
Para la campaña 1946-47, ya en el profesionalismo, se asentó en uno: el Estadio de la Ciudad de los Deportes, hoy en día conocido como el Azul. En la primera parte de los 60 pasó al Olímpico Universitario; en la segunda llegó al Azteca. Gracias a la remodelación del Coloso de Santa Úrsula para el Mundial de México 70 se vio a obligado a regresar a Ciudad de los Deportes y compartirlo con América y Necaxa hasta que concluyeron las obras.
Permaneció en el Azteca en los 70, contando su primer descenso en la 75-76 y su naufragio en la categoría de plata en lo que consiguió el ascenso. En los 80, los dueños rescinden el contrato que lo ataba al Coloso por 99 años para reaparecer en el Azul. Lo remodelaron y rebautizaron como Estadio Azulgrana.
Se quedan en la colonia Nochebuena hasta 1988-89, cuando migran al Estadio Corregidora de Querétaro por determinación de José Antonio García. El empresario se lo lleva motivado por las pérdidas de dinero y la poca concurrencia de la afición. Cae a Segunda otra vez y regresa al Azulgrana un año después para recobrar su estancia en Primera para la 1990-91.
La Liga 1992-93, la segundo en sus vitrinas, emigra temporalmente del Azulgrana al Azteca solo para la final de ida, frente a Rayados, con el objetivo de meter más simpatizantes. Salvo por eso, la cancha de los Insurgentes Sur era sólo suya hasta que Cruz Azul se desplaza ahí en 1996.
A mediados del 2002 se dirige al Estadio Neza 86, vacío tras el descenso de los Toros. En 2004 vuelve al Azteca hasta que en 2007 'vuelan' al Olímpico Andrés Quintana Roo, testigo de la tercera Liga, y la Concachampions 2009, que los catapulta al Mundial de Clubes del mismo año, en el que pone a sufrir al mismísimo Barcelona en semifinales.
Al terminar el Clausura 2014 pierde la categoría y continúa en el Ascenso a partir de entonces. Así pues, se trata del quinta retorno al Azul en su historia. El recinto en el que escribió sus páginas más doradas: un trofeo de liga —aunque se haya coronado de visitante en el Tec—, dos de Copa México, uno de Campeón de Campeones, uno de la Copa de Campeones de la Concacaf y uno de Segunda.