Al Real Madrid se le ha acusado en las últimas temporadas de no ser capaz de dar un golpe encima de la mesa cuando ha tenido al Fútbol Club Barcelona enfrente. Sí, desde hace años ha sido mejor y ha ganado la mayoría de los Clásicos, pero cuando ha tenido la oportunidad de reflejar esa superioridad en el marcador, no lo ha hecho. En cambio, el Barça, a la mínima que puede, hace sangre. Se vio el año pasado en el Bernabéu.
Quizás se deba a que el dentro de la evidente rivalidad, el Barça siempre ha sentido un odio mayor hacia el Real Madrid que el que los blancos le profesan al equipo azulgrana. También tiene que ver el estilo de juego, la importancia que se le da a cada competición... todo suma pero es evidente que los madridistas tienen la sensación de que rara vez han visto al Real Madrid salir con el mismo espíritu ante el Barcelona que en un partido eliminatorio de Champions.
Los de Ancelotti no llegan en un momento excelso de forma, pero la dinámica azulgrana (dos derrotas consecutivas) y las bajas del equipo de Xavi (Lewandowski, Pedri y Dembélé, además de Ansu Fati y Christensen entre algodones), convierten al cuadro merengue en absoluto favorito a tomar ventaja en la ida.
El partido luego irá por los derroteros que deba ir y el resultado será el que sea, pero la intensidad y la actitud únicamente depende del Real Madrid y deben dar la sensación desde el comienzo de que es un partido en el que se juegan muchísimo. Deben obligar a convertir este encuentro en un punto de inflexión en la temporada. Dejar solventada la semifinal de Copa y dejar tocado al Barça de cara al siguiente duelo de Liga debe ser mucho más que una motivación para ello. Ancelotti ya ha avisado de que cuando se aproxima la posibilidad de un título, la caldera sube de temperatura, por lo que este jueves, el Bernabéu debe ser una olla a presión para calentar el gélido inicio de marzo.
Camavinga y la meritocracia
Para el once, todo apunta a que Camavinga le ha ganado la partida a Tchouaméni. Habrá que ver si es solo para este partido o si es algo que se va a prolongar de aquí a final de temporada. El ex del Mónaco acaba de recuperarse de una enfermedad y eso condiciona. Pero también es cierto que Camavinga está en su mejor momento desde que llegó al club blanco y que se ha ganado con creces ser titular en este partido.
En el resto de la alineación no se esperan novedades. Rodrygo ha llegado al partido pero todo apunta a que será suplente y que Valverde, Vinicius y Benzema actuarán en ataque. Kroos y Modric escudarán a Camavinga y Carvajal, Militao, Rüdiger y Nacho jugarán con la intención de ayudar a Courtois a dejar la portería a cero.