El entrenador argentino Nestor Clausen no fue la solución que la directiva del santo buscaba para tapar el hueco que dejaba Villegas, ya pasaron dos meses y no hay los resultados esperados. El argetino puede ser despedido en las próximas horas.
Clausen tuvo un mal inicio, en su debut cayó por 5-1 ante Blooming, una de las peores goleadas que sufrió el equipo en los últimos años.
Sin embargo, esa no fue el único prooblema que le pasó ese día. Horas antes del cotejo tuvo que sacar a un futbolista porque jugaba con otra identidad y se rebajó los años, algo penado en el deporte boliviano, por lo que tuvo que recurrir a otro futbolista que ni siquiera había entrenado con el primer plantel.
En su segundo partido con los santos, Clausen sacó un empate 3-3 frente a Always Ready en un cotejo que bien pudo ganar, pero que se durmió en los dos últimos minutos.
Su tercer juego fue el mejor que tuvo, goleó por 3-0 a Aurora, luego ganó por 0-1 a Royal Pari. Sin embargo los malos resultados volvieron al santo que igualó 4-4 con Bolívar, empató 2-2 con Real Potosí, perdió 4-3 ante San José, volvió a empatar 1-1 frente a The Strongest, mientras que su equipo alterno logró un triunfo de 1-2 sobre Sport Boys.
El cotejo del martes era clave para la continuidad de Clausen al frente del santo, la directiva no estaba conforme con los resultados y su cabeza estaba por caer.
Frente a Flamengo, San José jugó bien, estuvo a punto de ganar por las posibilidades que generó, pero se topó con el guardameta brasileño Diego Alves quien fue la figura del compromiso. Para colmo de males, una distracción de la defensa hizo que se anote el único gol mediante Gabriel a los 60 minutos.
Tras el partido Clausen dijo que analizaría si sigue al frente del equipo o si pone un punto final a su continuidad al mando, sabe lo exigente que es la hinchada del santo, por tal motivo estuvo siempre con esa presión de sacar buenos resultados.
