A falta de cinco partidos -O’Higgins, la U, Huachipato, Iquique y Universidad de Concepción-, Universidad Católica quedó muy relegado en la pelea por el título, algo planteado como objetivo a inicio de semestre. Audax Italiano se impuso 5-2 en su estadio.
Marcos Riquelme, que fue capitán, metió un triplete en el segundo tiempo. El Faraón, que en su momento fue goleador del torneo con la camiseta de Palestino, rompió el empate que mantenían las dianas de Juan Pablo Miño y Ricardo Noir desde el primer tiempo.
César Cortés acabó con la ilusión de un vigente campeón que tendrá que centrarse en la Copa Libertadores y Cristián Álvarez hizo algo menos vergonzoso un marcador inapelable. Así, el sueño del tricampeonato quedó en el plano de la utopía, al quedar a ocho puntos pero en el puesto 11 de la clasificación.
