Ole Gunnar Solskjaer llegó la pasada temporada al banquillo del Manchester United a mitad de curso. Rápidamente revitalizó al equipo y uno de los principales motivos de ese crecimiento fue recuperar la mejor versión de Paul Pogba, un jugador clave en el sistema de los mancunianos que con Mourinho en el banco no estaba ofreciendo todas sus capacidades futbolísticas. Lleva un verano entero escuchando que se marcha, pero él asegura que no será así de ninguna de las maneras.
"Pogba se va a quedar, siempre ponéis interrogantes sobre él", decía el noruego en la rueda de prensa previa al partido que les enfrentará esta noche contra el Wolverhampton (21.00 h, en exclusiva en DAZN). El United, después de su excelente victoria contra el Chelsea en la primera jornada, busca seguir la misma línea contra un equipo peligroso que el pasado año logró colarse en competiciones europeas.
El entrenador está un poco cansado de esta rueda eterna en la que cada semana se especula con la posible salida del francés del club. "No ha habido ninguna rueda de prensa en la que no haya respondido a alguna pregunta sobre Paul Pogba y tengo absolutamente ninguna preocupación sobre Paul", recalcaba Solskjaer.
En ocasiones, parece como si el técnico hablase de una cuestión lejana, como si no fuese el propio Pogba el que desató los rumores con unas frases al principio del verano en las que decía que quería nuevos retos y nuevos objetivos. Eso, de algún modo, intentó comentarlo también, explicar que sus declaraciones eran poca cosa en comparación: "Claro que siempre hay signos de interrogación con él, pero también dijo que disfrutaba con su trabajo y con sus compañeros". Y con eso, en teoría, zanja toda la cuestión Pogba. Aunque hasta el 2 de septiembre, cuando cierre el mercado, no se debe asegurar más.
