El sprint que hace desde la media cancha enciende las alarmas del Liverpool. Levanta la cabeza, observa que tiene mucho espacio por delante y compañeros que se sumaron al contragolpe. Es entonces cuando se quita a Andrew Robertson con un elegante regate, descarga hacia una banda para Adama Traoré y luego va directo al punto penal, donde esperó la devolución de su compañero para marcar un golazo de clase mundial.
Ya pasaron dos años desde entonces y en efecto, aquella versión de Raúl Jiménez quedó muy atrás. La lesión afectó su confianza, interrumpió la regularidad de su juego y su regreso a las canchas no ha estado a la altura de las expectativas. La realidad es evidente: no es el mismo jugador que hace tan solo un par de temporadas era la sensación de la Premier League y estaba en la agenda de gigantes como el Manchester United.
Sin embargo, el entorno del Lobo de Tepeji también ha cambiado radicalmente y el contexto en el que intenta recuperar su nivel tampoco es el más favorable. No solo por la nueva propuesta que ha implementado Bruno Lage desde su llegada al banquillo del Wolves, sino también porque Jiménez actualmente no cuenta con los que fueron sus grandes socios en aquellas hazañas con las que se ganó el corazón del Molineux.
El primero en marcharse fue Diogo Jota, quien rápidamente se convirtió en una de las principales figuras de un Liverpool que actualmente pelea por todas las competiciones. Pero luego vino la baja más sensible de todas: la de Traoré. El extremo español poco a poco fue perdiendo su condición de indiscutible en la Manada y se fue en calidad de préstamo al Barcelona, equipo con el que debutó a nivel profesional.
El mejor aliado de Raúl
Cortesía GettyPara nadie es un secreto que la dupla que hicieron Traoré y Jiménez es una de las mejores en la historia del Wolves. En la temporada 2019-20, la más destacada desde que dio el salto a Europa, el delantero mexicano anotó 17 goles en la Premier League y siete de ellos llegaron gracias a una asistencia de Adama, con quien tuvo un entendimiento absoluto bajo la conducción de Nuno Espirito Santo.
Próximo partido
El equipo se siente muy cómodo cediendo la iniciativa al rival y aprovechando los espacios a través de rápidos contragolpes. En esa faceta Adama es un especialista y saca provecho de su físico, siendo el complemento perfecto para un Jiménez que suele ser letal en plan de finalizador. Ambos hicieron muchos goles por esta vía incluso ante rivales de la talla de Manchester City, al que ya lograron vencer.
Sin embargo, las cosas cambiaron para esta temporada y Adama no entraba en los planes de Lage, quien apostó por otras opciones para ese puesto. También buscó que Raúl se involucre más en funciones de elaboración de juego y Hee Chan Hwang quede mucho más adelantado, con lo cual el rol del canterano del América cambió considerablemente con respecto a otras temporadas.
De más a menos en Barcelona
UEFA.comTraoré llegó a Barcelona a préstamo y con una opción de compra de 24 millones de euros. Las primeras semanas fueron realmente positivas, pues le aportó al equipo de Xavi una profundidad que hasta entonces no tenían. Rápidamente se ganó un lugar en el once inicial y tuvo mucho que ver con esa notable mejoría que mostró el equipo en los primeros meses del año.
Pero aquello fue desapareciendo con el paso del tiempo. El regreso progresivo de Ousmane Dembélé y la buena participación de Ferran Torres por el costado izquierdo, dejaron al imponente extremo español sin mayores oportunidades en el cuadro catalán y hasta el momento es el único de los refuerzos que llegaron en el mercado de pases de invierno que no ha logrado convertir goles.
En ese escenario, la continuidad de Adama en el Barcelona está seriamente comprometida. Algunos medios especularon en su momento con la posibilidad de un intercambio con Trincão, quien actualmente está cedido en el Wolves; sin embargo, el extremo portugués ha tenido un paso bastante discreto por la Premier League y todo indica que la Manada no tiene intenciones de hacer efectiva la opción de compra.
¿Vuelve el viejo Jiménez?
Cortesía GettyEn estos momentos, lo más probable es que Traoré regrese al Wolves de cara a lo que será la próxima edición de la Premier League. Y eso puede ser una extraordinaria noticia para Raúl, ya que reencontrarse con el mejor socio que ha tenido en Inglaterra puede ayudarlo a recuperar viejas sensaciones y poco a poco rendir a ese nivel que le vimos durante las últimas temporadas.
Se trata de un extremo puro, desequilibrante en el uno contra uno, que se entiende de mil maravillas con Jiménez y que además cuenta con una gran precisión en sus servicios al área. Es todo lo que le ha faltado al mexicano en esta campaña tan dura para él, en la que ya tiene exactamente tres meses sin mandar el balón al fondo de las redes con el Wolves.
El duelo contra Manchester City fue una nueva demostración de lo solo que está Jiménez en el ataque. Los Citizens dominaron la posesión a su antojo y las oportunidades de jugar al contragolpe fueron muy escasas. Tal vez es todo lo que necesitaba el Wolves para darse cuenta que el regreso del viejo Jiménez pasa, necesariamente, por brindarle la oportunidad de volver a jugar con su mejor aliado.