Luego de sufrir su primera derrota como entrenador ante Corea del Sur, el balance de Carlos Queiroz no puede ser más que positivo, pues más allá de la derrota, el entrenador portugués logró probar variantes y le dió oportunidad a varios jugadores que venían siendo pedidos por la hinchada colombiana.
El descubrimiento de nuevos talentos por las bandas es una buena noticia, así como la incorporación de Luis Díaz para apoyar el ataque, dónde después de mucho pedirlo se pudo apreciar a Duván Zapata vistiendo la Tricolor y sumándole potencia a la zona ofensiva.
Federación Colombiana de Fútbol
Si bien, perder nunca es el ideal, es mejor que las derrotas lleguen temprano y en juegos de esta índole, donde no se pone mucho en juego y donde lo que realmente cuenta es la vivencia de tener al grupo reunido por primera vez, compartiendo en la intimidad de la concentración y conociéndose tanto en la victoria como en la derrota.
Seguramente para la próxima convocatoria habrá algunos cambios, regresarán algunos viejos conocidos y se sumarán otro que estén teniendo un gran momento, así como no estarán los que no rindieron, esa es la labor que parece tener clara Queiroz, la de seleccionador y entrenador, algo que en sus primeros dos partidos ha ejercido con solvencia y trabajo duro.
