"Gracias a todos, grazie a tutti". En castellano y en italiano, Nicolás Burdisso puso fin a su carrera como futbolista profesional. El defensor surgido en Boca publicó un texto donde recuerda que se cumplen 19 años de su debut y anuncia que "llegó el momento de terminar esta aventura", agradeciendo a quienes lo acompañaron en esta etapa. Y la foto elegida para la despedida no es azarosa: un sentido abrazo con Diego Maradona durante la Copa del Mundo del 2010, cuando el astro era el DT y el zaguero uno de sus pilares.
Después de su aparición en el Xeneize, saltó al fútbol italiano y defendió las camisetas de Inter, Roma, Genoa y Torino, club del cual quedó libre a mediados de año, razón por la cual quedó una espina entre los hinchas de Boca: ¿por qué nunca volvió? El cordobés fue uno de los protagonistas centrales de la época más brillante de la historia del club de la Ribera. Desde su aparición en Primera en 1999 hasta su transferencia a mediados de 2004, consiguió tres Copas Libertadores, dos Intercontinentales y dos torneos locales de la mano de Carlos Bianchi y se ganó para siempre un lugar en el corazón de los hinchas del Xeneize. Año a año, sobre todo sobre el final de su carrera, se especuló con un posible regreso que no ocurrió y, con este anunció, no ocurrirá.
Hace unos meses, el futbolista dio las explicaciones del caso: "Nunca se encontraron las voluntades. Hubo algunas veces en las que Boca necesitaba un central y yo, por decisiones personales, no vine. Y cuando yo estuve con ganas de volver, el puesto estaba cubierto. Como ahora, que tiene cuatro o cinco defensores de muy buen nivel y lo último que necesita es otro central", explicó en julio.
En ese diálogo con TNT Sports, Burdisso contó: "Hay veces que los mercados son así. En su momento estaba mi hermano y yo entendía que era su momento. Después estaba el Cata Díaz, que tenía 36 años, y yo estaba en 34 o 35, entonces sabía que dos centrales de esa edad en Boca era difícil". Y en ese sentido, aclaró: "Fueron cuestiones netamente futbolísticas, no hay nada más atrás. Si no volví fue porque mi posición estaba cubierta".
Próximo partido
A los 37 años, llegó el momento de parar la pelota, dejando una infinidad de recuerdos. Y más allá de este desencuentro, los fanáticos de Boca no dudaron en agradecerle todo lo que le dio al equipo en la era dorada.
