El pasado jueves, casi 40.000 aficionados del Eintracht de Frankfurt asistieron al partido frente al Barcelona en el Camp Nou. Esa "invasión" generó mucho malestar entre los socios y aficionados culés, que se sintieron fuera de casa y en un campo hostil por el comportamiento de algunos de los seguidores alemanes. Tras ese suceso, la grada de animación situada en el Gol Sur del estadio decidió no acudir al partido de este lunes ante el Cádiz como medida de protesta. Joan Laporta compareció este martes ante los medios de comunicación para aclarar la gestión en la venta de entradas, acompañado del vicepresidente de márketing, Juli Guiu, y del jefe de seguridad, Lluís Venteo.
Valoración previa de Laporta
"Una vez informamos de los datos que teníamos referentes a las entradas del partido contra el Eintracht hemos evaluado estos datos y ya dije que daríamos explicaciones. En el turno de preguntas estaremos abiertos e intentaremos responderlas adecuadamente. Quería empezar agradeciendo a todos los socios, socias y barcelonistas que asistieron al partido. Eran vacaciones de Semana Santa, sabíamos que había gente que se había ido. A los de ayer también, porque realmente tuvimos un ambiente que es de agradecer. Quiero también pedir disculpas a todos esos socios, socias y aficionados que sufrieron una situación no deseable, que se sintieron incomodados por una presencia masiva de aficionados al estadio".
"La gestión y la venta de entradas regulares, si restamos las 5.000 para los alemanes, quedarían las 29.435 entradas. Eran entradas con mecanismos de control, que no se admitieron tarjetas de crédito ni IPs alemanas. Se intentó desde Alemania, varias veces. No sé si llegaron a ocho intentos. Al final, el sistema se desbordó. Agentes no oficiales externos al club, grupos organizados y especialistas en la reventa de entradas hicieron que los mecanismos fueran superados. Esta es la explicación técnica. También observamos que de los abonados que asistieron también hubo un mal uso de los abonos, que acabaron en manos de alemanes. Ahí sí no tenemos control de ventas. Los que amamos al Barça nos cuesta imaginar que la entrada de un abonado vaya a parar a manos de aficionados alemanes".
"Este sistema lo hemos heredado de la junta anterior. Hemos centrado esfuerzos en recuperar la economía del club y esto pertenece al área social, de ticketing, de informática y de seguridad. En partidos especiales como este se daban las circunstancias idóneas para que se produjera este suceso".
"En la seguridad privada pasó lo mismo que en ticketing. Normalmente funciona, pero cuando también quedó desbordada".
Próximos partidos
"El club no es culpable de lo que sucedió, pero es el máximo responsable. Evidentemente tenemos que procurar que no vuelva a suceder nunca más lo que sucedió. Insisto, el club no vendió entradas a los alemanes. Esto fue provocado por todo lo que hemos descrito".
"Hemos tomado medidas. Para los partidos de alto riesgo o especiales, haremos entradas nominativas con sistema digital". Lo detalla Lluís Venteo. "El Seient Lliure solamente será para los socios. Siguiendo unos criterios que priorizan la asistencia de barcelonistas al estadio tomaremos estas medidas consensuadas por todos. Deberemos ser más estrictos".
Valoraciones del vicepresidente Juli Guiu
"Se vendieron 34.435 entradas de venta regular, mientras que la asistencia de abonados fue de 37.746. Las entradas de taquilla fueron 1.500, con pasaporte. Online, 23.427. Y 3.670 a través de tour operadores. El sistema estaba funcionando hasta que se desbordó. El socio pudo comprar entradas a 22 euros y el residente, por 26. Es un sistema dinámico que a medida que pasa el tiempo sube el precio. Hemos detectado un tour operador que hizo una mala praxis, con el que rescindiremos el contrato".
Valoraciones del jefe de seguridad, Lluís Venteo
"El partido estaba declarado de alto riesgo, como el resto de partidos de Europa League. Nuestra preocupación eran esos 5.000 teóricos que venían del Eintracht. Tenemos que reconocer que la situación no era la esperada, ni mucho menos. Las puertas estaban completamente llenas de aficionados alemanes con camisetas blancas. La situación en la que trabajamos no era la idónea. Hay un cambio de cultura, porque esta gente llega al estadio muy temprano, están de pie, están bebiendo. Esto provocó las fricciones que tuvimos durante todo el partido con aficionados locales. El reparto de aficionados alemanes era por todo el estadio con grupos más numerosos. Donde menos problemas tuvimos fue con los 5.000 que estaban previstos, con la situación completamente controlada. El problema fue con la afición local. El resultado no ayudó, las cosas como sean. El malestar de aficionados azulgrana contrastaba con la alegría de los alemanes. Los incidentes graves fueron limitados, pero llegamos a doblar los grupos de intervención para solventar incidencias. En la parte final, todos los aficionados se congregaron en una zona. Fue mejor para que el aficionado blaugrana saliera y no tuvieran más disputas".
"Uno de los sistemas posibles es por aplicaciones móviles, teniendo una trazabilidad. Se puede ceder, pero con condiciones. En la próxima final de Turín se utilizará este sistema. Hay clubes en España que ya están haciendo pruebas, como Osasuna. Es un cambio de cultura, porque la gente está acostumbrada al plástico o al papel, pero todo cambiará. La finalidad es conocer a todo aquel que entre en el estadio. El socio podrá ceder el abono, pero sabremos quién va".
Rueda de prensa
¿Culpa solamente de la herencia?: "Es fácil decir que se veía a venir. Seguro que lo podíamos haber hecho mejor. En las reuniones con UEFA dijimos que venían 5.000 con entradas y el resto sin entrada, algo que no fue cierto. Se tendrán que depurar algunas responsabilidades. Los que vinieron sin entrada encontraron la posibilidad con socios abonados, es una evidencia que sus abonos fueron a parar a manos alemanas. Preocupados sí estábamos desde el momento en el que había tantos alemanes. Incluso se paró la Diagonal. Si les hubiésemos prohibido la entrada puede que hubiéramos provocado altercados. Los tour operadores no son el grosor de esas entradas. A nivel interno haremos las reflexiones con un grupo de trabajo. Pensamos que no fue lo deseable, pero todos intentamos hacer lo mejor posible nuestro trabajo".
Medidas contra abonados: "Es grave. Es un acto que los barcelonistas no entendemos ni aceptamos. Ellos sabrán por qué lo han hecho. Tenemos conocimiento del número de socios que compraron entradas. Los abonados no lo sabemos, porque lo hacen de forma diferente. Unos 7.000 hicieron un mal uso. Desde reflexión o advertencia actuaremos. La comisión de disciplina acabará actuando y desde el terreno legal también. 7.800 socios compraron entrada con el 50% de descuento, a 22 euros. Esas entradas acabaron en manos de alemanes. Tampoco tenemos la voluntad de perseguir a nadie. Hay una gran decepción con esa actuación de los socios, pero no nos libera de responsabilidad y queremos actuar con transparencia".
Cuál es la explicación para ese desborde del sistema: "No es que se bloqueara. Los alemanes intentaron comprar y las medidas funcionaron. El sistema se desbordó porque consiguieron encontrar otras vías para comprar entradas, mediante grupos organizados que esperaban que los mecanismos funcionaran para aprovecharse".
Actuar contra grupos organizados: "Decidimos erradicar los violentos del estadio. Ahora tenemos que trabajar, iniciar acciones para que esos grupos no consigan esos objetivos. Estos grupos provocan violencia e incomodidad. Hay suficientes argumentos para trabajar con la policía para que esto no suceda nunca más y combatir estos comportamientos. Esto ha sucedido siempre y es muy difícil de detectar, porque es gente que tiene muchos carnets. Saben como hacerlo. Nos tenemos que poner con eso y actuar contra los grupos de reventa. No rechazamos las responsabilidades, las asumimos todas".
Explicaciones a la plantilla: "La misma noche di explicaciones a Xavi. Lo mismo que he estado explicando aquí pero con menos detalle porque no habíamos hecho el análisis. Lo que más me preocupa fue que nuestro autocar fuera apedreado por gente llegando al estadio".
Sanción de la UEFA: "La UEFA nos felicitó, en parte, porque tal y como se produjeron los acontecimientos hubiera podido ser peor. En la medida de nuestras posibilidades, sin rehuirlas, hicimos todo lo que pudimos para que no hubiera mayores altercados. ¿Se produjeron algunos? Sí. Pero se hubieran podido producir más".
Bajón en los resultados y el juego: "El tramo final de Liga lo estábamos encarando muy bien con el resultado del Bernabéu y ahora tenemos dificultades para ganar. Sé que Xavi está analizándolo y buscando soluciones. Tampoco nos acompañan las lesiones. La situación es distinta a la que algunos nos esperábamos. Pero bien, mientras haya vida hay esperanza. Es obvio que tenemos que luchar en estas siete finales para que el resultado sea el máximo posible. No se trata de tirar la toalla, pero se ha puesto muy complicado ganar LaLiga. Vamos a tener que mentalizarnos con estas siete finales para estar como mínimo en Champions el año que viene".
Grada de animación: "El mensaje es que los esperamos en el próximo partido, deseamos que vuelvan y que sigan animando al equipo. No nos gusta ver esa grada vacía. Pienso que dan la atmósfera adecuada al estadio. La valoración de lo que hicieron me la reservo, porque me supo mal por el equipo. Son gente muy generosa con el equipo, ellos tiene sus razones y se las respeto. Les pediría que vuelvan a animar al equipo. El ambiente estuvo bien, solamente faltaban ellos. Hubiera sido mejor. El barcelonismo se ha de movilizar porque tenemos siete finales. Espero que la decisión la circunscriban al partido de ayer. Deseo que vengan".
Abonados que no asisten: "Hay entre 15 y 20.000 abonados que no vienen ni liberan. El abono es la cesión por una temporada de un derecho de uso. Nos estamos planteando medidas para incentivar la asistencia o exigir un mínimo de asistencia para que los barcelonistas que quieran venir y sean activos puedan conseguir un abono. Ahora no retiraremos abonos, pero sí lo estudiaremos a fondo porque los estatutos nos lo permiten".
Recaudación: "3.600.000 euros".
Sensaciones del presidente: "Esta Semana Santa ha sido como la Pasión de Cristo. Empezamos el Jueves Santo con una decepción y terminamos el lunes de Pascua con otra decepción. Nos tenemos que reforzar par el tramo final de Liga. ¿Cómo estoy? Después del golpe de ayer, no tiro la toalla. Mientras haya vida hay esperanza. En el fútbol puede pasar de todo siempre. Me hubiera gustado hacer esta rueda de prensa habiendo ganado al Cádiz. Quiero hablar de otras cosas que ahora no puedo porque parecerá que voy de víctima. Me refiero a otros aspectos que me gustaría comentar a nivel deportivo. Pero no es el momento. Después del golpe nos hemos rehecho. Necesitamos a la afición para ayudar al equipo en todo lo que haga falta. Mientras haya matemáticamente posibilidades de ganar el campeonato lucharemos. Es obvio que se nos ha complicado, pero esperemos jugar la Champions el año que viene. Estamos con fuerzas para seguir luchando".
Derecho de admisión al estadio: "En este caso era completamente inviable. Si hubiésemos bloqueado el acceso a 30.000 alemanes hubiera sido imposible pararlos. Ni nos los planteamos. Era una abrumadora mayoría de aficionados alemanes, hubiera sido extremo. Junto con la policía decidimos no hacer nada y dejar entrar" [respuesta de Lluís Venteo].
Grupos organizados: "Hacen trampas. La ley no prohibe revender la entrada si se hace respetando las condiciones de esa entrada. Hay gente que vive de eso. Es un modus operandi difícil de desmontar. Llegamos donde llegamos. No tenemos investidas potestades para perseguir y sancionar estas conductas. Lo que sí podemos es describir e informar de esa conducta para que no se vuelva a producir. Pero es habitual de personas que viven de eso. Y que están cada vez más organizados. El sistema digital les ayuda, es muy superior a lo que pasaba en la antigua reventa".
Intermediación de Piqué en la Supercopa: "Piqué ya dio ayer sus explicaciones y no tengo nada más que decir. Es un tema que ni conozco, ni sé cómo se inició. Lo único que sé es por los medios y no voy a opinar. Piqué dio sus explicaciones, que es quién tenía que hacerlo".
Arbitrajes: "Se lo pareció a usted, tiene mucha imaginación. Algún día tendremos que hablar, pero no creo que sea el día. Hay algunas situaciones que bueno, que se está produciendo y deberíamos comentar de vez en cuando. Que son muy obvias. Pero hoy no es el día, porque estamos hablando de un tema muy serio. Este también lo es por lo que se produce, pero bueno".
Por qué llegan a la conclusión de los 7.000 abonados: "No podemos asegurarlo, pero por la visual, se podía estimar este número. Pero sin certezas. Trabajamos sobre esta estimación. Si en el partido del Eintracht vinieron 37.746 abonados, hacemos la estimación que nos aproxima a la cifra para que el grupo de trabajo lo analice. De la visual de las cámaras se veían núcleos de alemanes".