Claudio Bravo

El duro panorama que le espera a Bravo tras ser campeón

El arquero chileno Claudio Bravo sumó este domingo un nuevo título a su palmarés, esta vez el primero con el Manchester City que derrotó por 3-0 a Arsenal en la final de la Copa de la Liga disputada en el mítico Wembley. 

Esta nueva corona podría significar la despedida del semestre para el formado en Colo Colo, pues se puso fin a una de las escasas competiciones donde tenía su titularidad asegurada. La Carabao Cup fue el sostén de Bravo en una temporada en la cual se remitió en participar de las copas locales, mientras que en los torneos grandes el titular es Ederson. Su primer adiós fue ante el modesto Wigan, por la FA Cup.

"Siempre ha sido mi idea estar de la mejor manera posible, trabajar fuerte y conseguir muchos títulos. Me queda la satisfacción de haber hecho lo mejor en este torneo y haber alzado un nuevo trofeo, que es algo importante y que lo atesoro de una manera muy buena”, expresó ante los medios en la zona mixta.

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Respecto a las críticas que rondan en torno a sus actuaciones, el capitán de La Roja afirmó que “estoy tranquilo. Sé de sobra las cosas que puedo hacer y aportar al equipo. Desde el día uno que llegué siempre he hecho lo mismo. Me queda la tranquilidad de que he hecho las cosas bien, más allá de las cosas que se hablen”.

Cabe destacar que con el triunfo, Bravo sumó 13 títulos tras los conseguidos con Colo Colo, Real Sociedad y Barcelona: dos Ligas, dos Copas del Rey, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa y la Copa Mundial de Clubes. Además de las dos Copa América (2015-16) defendiendo a Chile.

Con el Cacique se alzó en el Torneo de Apertura 2006, en la final ante Universidad de Chile, donde se vistió de héroe en la tanda de penales.

Su segunda coronación llegó en la Segunda División de España (2009-2010). Esa vez logró ascender con su equipo, siendo figura clave en toda la campaña.

Tuvieron que pasar cuatros años y, en su primera temporada en Cataluña, el golero hizo notar su calidad, ganando además el premio Zamora. También se quedó ese año con la Liga de Campeones aunque quizás fue el título más ingrato para el oriundo de Viluco, pues pese a que fue nominado en todos los partidos, Luis Enrique prefirió a Marc-André Ter Stegen en la titularidad. De todas formas, es el primer chileno en ganar el máximo trofeo europeo.

Misma situación ocurrió en la Supercopa de Europa, aunque sí estuvo en la nómina que venció por 5-4 a Sevilla en la prórroga. El Mundial de Clubes fue su redención y de ahí su panorama cambió: conquistó La Liga 2015-16 siendo clave y figura.

Su último trofeo con los culés fue la Supercopa de España en la que jugó los dos partidos ante el Sevilla de Jorge Sampaoli a muy buen nivel. Sobre todo en el segundo compromiso donde fue destacado al tapar un penal.

Con los Citizens, fue fundamental en la clasificación de principio a fin: en las semifinales se lució al contener el lanzamiento penal de Riyad Mahrez que decretó la victoria de su equipo sobre el Leicester en el King Power Stadium. Fue la segunda vez que “salvó” a su escuadra pues lo hizo antes (en octavos) frente a Wolverhampton Wanderers FC en el Estadio Etihad, encuentro en que le ahogó el grito gol a N'Diayé y Coady. 

Y ante los Gunners no solo contuvo en doble instancia un remate de Aubameyang dejando su portería en cero, además, se dio el lujo de asistir el tanto de Sergio Agüero para que -de sombrerito- el argentino marcara el primero para su escuadra que cerró su participación con un contundente 0-3.

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