Carlos Marinelli es, tal vez, el mejor ejemplo de un jugador joven y prometedor que cayó en la maldición de la etiqueta de 'El nuevo Maradona', condenado a una carrera que cayó muy por debajo de esas expectativas colosales. Nacido en Villa de Mayo, en las afueras de Buenos Aires en 1982, Marinelli surgió en la famosa academia de Argentinos Juniors y, al menos al principio, parecía estar siguiendo perfectamente los ilustres pasos de Diego Armando Maradona.
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De hecho, con solo 15 años, recibió su gran oportunidad cuando Boca Juniors hizo un scouting tremendo entre los juveniles argentinos, fichando no menos de siete jugadores, entre los que destacaban, además de Marinelli, chicos como Fabricio Coloccini y un tal Juan Román Riquelme. Sin embargo, Marinelli estuvo poco tiempo en la Bombonera. Sus actuaciones en una gira Sub-19 en el Reino Unido llamaron la atención de Middlesbrough, que pagó algo menos de dos millones de euros por su traspaso.
Marinelli debutó en el Boxing Day de la temporada 1999/2000, siendo una de las únicas dos apariciones que tuvo aquella temporada. El año siguiente, por culpa de las lesiones, apenas jugó 13 partidos, pero a pesar de ello, las esperanzas en el argentino no decaían. "Marinelli asusta a los rivales. Técnicamente es fantástico y solo le falta ser más fuerte", declaró Paul Ince.
Un rayo de luz alumbró Riverside después de que Marinelli anotara dos goles ante el Derby County en noviembre de 2001, sin embargo todo se apagó y el argentino fue cedido al Torino. Su capítulo más recordado allí fue la expulsión que protagonizó en el derbi ante la Juventus: "Quítate esa camiseta de la Juventus", le dijo Marinelli al árbitro cuando le enseñó la tarjeta roja. A finales del año 2003, su contrato con el Middlesbrough fue rescindido de mutuo acuerdo.
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Hasta ese momento, la carrera de Marinelli había sido totalmente decepcionante, algo que no le afectó psicológicamente. Además, su vuelta a Boca Juniors en 2004, bajo las órdenes de Carlos Bianchi, podría servir para relanzar su fútbol, pero nada más lejos de la realidad: tras jugar solo tres partidos y enfrentado con el técnico, Marinelli fue cedido a Racing, donde nada más llegar criticó al propio Bianchi y sus compañeros en Boca: "¿Cómo podria enseñarme algo (Bianchi) si ni quiera hablaba conmigo?, comentó en 'El Gráfico'. "Uno de los grandes nombres del equipo probablemente también hizo algo para que saliera del equipo. En Inglaterra te ganas el puesto jugando bien, no comiendo con los hinchas", continuó.
Después de fracasar en Racing por enésima vez, Marinelli se convirtió en un trotamundos del fútbol, pasando por Toronto, Portugal, Estados Unidos, Colombia, Argentina y Hungría. La carrera del argentino terminó en Perú. Firmado en 2011 por la Universidad de San Martín, y solo con 28 años, el argentino fue llevado a Lima con grandes expectativas y vistiendo la '10'...pero marcó solo cinco goles y Universidad, después de haber ganado tres de los útlimos cuatro títulos de la liga peruana antes de la llegada de Marinelli, no pudo ganar un solo campeonato durante su estadía de cinco años.
Las lesiones obligaron finalmente a Marinelli a dejar Universidad con solo 32 años. Los intentos de Goal por contactar con él han sido en vano, porque sus siguientes años los ha vivido disfrutando plenamente de su retirada y sin apenas hacer declaraciones públicas, aunque a día de hoy sabemos que es representante de jugadores, entre ellos, de Pedro Gallese, guardameta de Perú. Quién sabe si Marinelli acabará vendiendo a alguno de sus jugadores como el 'nuevo Maradona', una espectacular etiqueta con la que él mismo no supo cumplir durante su carrera vacía de títulos.
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