Luego de dos días sin entrenar, el primer plantel de Petrolero del Chaco volvió al trabajo con la mirada puesta en el cotejo del domingo contra Bolívar, por la fecha 14 del torneo boliviano.
Los jugadores y la directiva del club llegaron a un acuerdo para que se pague lo antes posible la deuda de dos meses que tiene la institución hacia sus trabajadores, esa promesa de pago hizo que el equipo se entrene en Yacuiba.
Las cosas no marchan bien en el equipo chaqueño, si bien sacó muchos puntos en condición de visitante, aún no logra meterse en la zona de clasificación a un torneo internacional por lo que se quedaría sin nada en 2018.
Florencio Vargas, presidente del club, anticipó que se quedaría en la institución hasta finales de diciembre porque mantener a un equipo como Petrolero le resulta difícil.
Además Vargas dijo que Yacuiba no está para tener un equipo profesional porque la gente no apoya y tampoco hay los auspicios necesarios para mantenerse a flote.
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