Ángel di María explotó como toda Argentina, luego de su golazo que empató los cartones en el duelo contra la Selección de Francia por los octavos de final del Mundial 2018. El atacante, además de festejar con el típico gesto del corazón, también le agregó un adicional: un "¡los huevos así de grandes!".
El futbolista del PSG estalló de bronca después del disparo de fuera del área que niveló la balanza a la anotación de penalti de Antoine Griezmann. El Fideo se acercó a la tribuna donde había una mayoría de compatriotas suyos y realizó ese ademán.
Ángel es uno de los elementos más criticados por la hinchada debido a la falta de títulos oficiales a nivel mayor desde 1993.
El artículo sigue a continuación
.jpg?auto=webp&format=pjpg&width=640&quality=60)