Tras un semestre tranquilo, en el que Boca pudo trabajar en paz sin el habitual caos que lo rodea, el escándalo no se hizo esperar en 2018. Wilmar Barrios y Edwin Cardona fueron denunciados por violencia de género y amenazas tras un confuso incidente en un departamento de Puerto Madero el lunes a la madrugada.
Ambos jugadores desmintieron el hecho, pero, por la tarde, las mujeres que habrían sido agredidas presentaron la acusación en Prefectura. Según Juan Cerolini, el abogado de una de las denunciantes, "hubo un episodio en un ascensor, en el que uno de los jugadores empuñó un cuchillo".
El miércoles cerca del mediodia se confirmó que, finalmente, los colombianos no viajarían a Mar del Plata para el amistoso ante Aldosivi. Tampoco lo hicieron su compatriota Frank Fabra ni el arquero de 17 años Manuel Roffo, implicados en el caso como testigos.
Desde el club, aseguran que, en caso de que estas acusaciones terminen siendo verídicas, habrá una sanción ejemplar para ambos. De hecho, el presidente de Boca, Daniel Angelici, señaló que si se confirmaran los hechos, el club actuará en consecuencia: "Yo realmente aprendí que hay que estar tranquilo y esperar las pruebas. Y ahí sí no nos va a temblar el pulso para actuar de la manera correcta. Si aparece la denuncia, si nos notifican, el club va a estar respondiendo por eso".
Por otra parte, el abogado de los colombianos, Miguel Ángel Pierri, aseguró que "Cardona y Barrios están a disposición de la Justicia. "Creo absolutamente en el relato que me hicieron Edwin y Wilmar. La voz del audio que circula no es la de Edwin", dijo acerca del diálogo que se filtró en las redes.
Próximo partido
"Estoy esperando que citen a todas las personas implicadas. Las chicas formaban parte del equipo del peluquero. Me resulta raro que la denuncia se haya hecho cinco días más tarde. Ellos sólo fueron a cortarse el pelo. Me llama la atención el tenor de la denuncia y las características. Espero que el juez los llame a declarar pronto, todavía no lo hizo", indicó el letrado, y agregó: "Recién hablé con Wilmar y me dijo que seguían convocados al equipo. Están muy afectados, ellos y sus familias. Está en juego su futuro futbolístico".
LA DENUNCIA COMPLETA
A través de su web, TyC Sports dio a conocer el contenido del expediente de la denuncia contra los jugadores colombianos de Boca. A continuación, el texto:
Dos mujeres llegaron a un departamento que les dijeron que era de Wilmar Barrios. Allí estaba el dueño de casa junto con Edwin Cardona y un tal Sebastián, quienes les dijeron que no se podía tomar agua, solo alcohol.
Los jugadores les pidieron que bailaran e hicieran un show, algo a lo que las mujeres accedieron. Durante la noche, además, hicieron reiteradas compras de botellas con forma de calavera y continuaron pidiendo más shows de las chicas, pero de manera agresiva.
En un momento de la noche, Cardona enojado les dijo que él quería que hicieran lo que él quería: "Te crees diva, para algo te contratamos". Y a partir de ahí la cuestión empeoró: "Las señoritas trataban de controlar la situación pero luego ven que Barrios tenía una cuchilla en su cintura". Aquí se suma un tercero en cuestión: Frank Fabra. El lateral ingresó y se puso a bailar pero de manera pacífica.
Barrios le dio "un cachetazo con la mano abierta en la cara y patadas" y en el sillón la denunciante le pidió "que no la tocara porque no le gustaba eso ni le causaba gracia", pero el mediocampista contestaba: "A mi me gusta, a mi me gusta".
La denuncia sigue contando sobre una discusión por cuestiones de dinero: "Cardona no accedía a pagar por los shows y empezó a insultarlas. Una de las chicas quería hacer un trato pero no llegaron a ningún acuerdo". Después de eso las mujeres intentaron irse, pero Barrios tomó por la espalda a una y cuando la otra le dijo que la soltara la empezó a empujar y no las dejaban bajar trabándoles el ascensor y dándoles golpes tipo cachetazos.
Solo cuando una de las señoritas le dijo que estaba embarazada los jugadores accedieron a dejarlas ir -a eso de las 5:30 de la mañana- y en el hall del edificio, con un empleado de seguridad como testigo, Sebastián les pidipo disculpas en nombre de los futbolistas.
