EDITORIAL
El barcelonismo necesitaba un gesto de Samuel Umtiti que volviera a poner las cosas en su sitio. El excepcional rendimiento que sigue dando en su segunda temporada como azulgrana y la facilidad de trato con el resto de sus compañeros le han convertido en un jugador innegociable para Ernesto Valverde, quien asegura que "sé que está contento aquí". Sin embargo, es uno de los que menos cobra de la plantilla a pesar de ser titular indiscutible y en las últimas semanas ha aparecido en varios medios franceses alimentando la incertidumbre ante una continuidad que se daba por sentada hace apenas unas semanas.
"Pido el comodín" respondió cuando debía utilizar un "sí" o un "no" para explicar si iba a seguir en el Camp Nou la próxima temporada. Este redactor incluso coincidió con él en el Miniestadi durante los cuartos de final de la Champions League femenina y el francés declinó amablemente realizar cualquier declaración o citarnos para hablar de ello dentro de unos días. De algún modo, Umtiti sabe que ha hablado demasiado y no quiere volver a cometer ningún error que pueda dar con él lejos del Barcelona, el equipo que confió en él hace año y medio, y resolvió hablar donde tiene que hacerlo un futbolista: en el césped.
El francés puso el pie para que Kostas Manolas marcara en propia puerta el 2 a 0 frente a la Roma. Extasiado ante el que habría sido su primer gol de la temporada (con el Barcelona ya se estrenó la temporada pasada ante el Celta), corrió a la banda mientras se besaba repetidamente el escudo. Pocos gestos son tan clarividentes como este, aunque deberá acompañarlo de nuevos silencios, tanto suyos como de su hermano y representante, porque el Barcelona no tiene ninguna duda de renovarle. Eso sí, le ha pedido que se espere hasta el 1 de julio para poder incluir su nuevo salario en los balances de la próxima temporada.
Umtiti sigue a lo suyo a pesar de las salidas de tono de los últimos días y aseguró el segundo tanto de su equipo ante una Roma que también había encajado el 1 a 0 de parte de uno de sus jugadores, Daniele De Rossi. Al final, fue Gerard Piqué quien pudo marcar el 3 a 0 y cerrar la eliminatoria frente al cuadro italiano. Los 'giallorossi' alcanzarían a anotar el merecido 3 a 1 a través de Edin Dzeko antes del estreno goleador de Luis Suárez, quien puso el 4 a 1 definitivo, en uno de los partidos más grises de la temporada. Por lo menos sirvió, además de para encarrilar el pase a las semifinales de la Champions League, para constatar que el compromiso de Umtiti con el club permanece intacto.