Por Ana Cruz Manjarrez 
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El futbol pasó a segundo plano cuando tres jugadores de la Selección Mexicana fueron señalados por sus problemas legales en los últimos meses del año: Márquez, Herrera y Reyes. Solo el capitán dejó las canchas por un tiempo. El 9 de agosto, sin que alguien lo anticipara, el nombre de Rafael Márquez Álvarez apareció en la lista negra del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, el motivo fue el vínculo con un grupo criminal del narcotráfico.
La noticia comenzó a circular dentro y fuera del país: el capitán del equipo mexicano está acusado de ser prestanombres de Raúl Flores Fernández, quien se dedicaba al tráfico de drogas y lavado dinero, apoyado por una red de amigos y familiares para mantener activos. La aparición en esa lista tuvo como consecuencia la congelación de los bienes y cuentas, además de una prohibición para relacionarse con firmas estadounidenses.
Rafa Márquez puso en pausa su actividad con el Atlas entre las críticas, reproches y burlas de las que fue objeto tras conocerse la acusacion. Volvió a las canchas una vez que obtuvo el permiso del Departamento del Tesoro; sin embargo, puede jugar solo en México y sigue sin visa. La cuenta de partidos que ha disputado durante dos décadas en la selección se detuvo el 7 de julio y a pocos meses del Mundial, que podría ser el quinto en su trayectoria, no ha regresado. La investigación continúa.
Próximo partido
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Justo tres meses después de esa acusación, Diego Reyes y Héctor Herrera fueron exhibidos por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación. El resultado de esa investigación está agrupado bajo el nombre de 'Paradise Papers' y entre muchos políticos y empresarios, señala a los jugadores por crear cuatro empresas "de papel" en Malta, que les han permitido pagar solo 5% de impuestos aplicados por el gobierno y recuperar el dinero poco después beneficiados por el régimen fiscal de la isla. Las empresas originadas en 2014, un año después de llegar al Porto, reciben dinero por sus derechos de imagen.
La respuesta de la agencia que representa a Héctor Herrera tardó pocas horas: "Herrera paga 53% de su salario en impuestos alineado con el ISR de Portugal" y sobre todo resaltó su calidad moral como ciudadano. Diego Reyes, también a través de su agencia, comunicó que mantiene su situación fiscal en orden al destinar el mismo porcentaje al pago de impuestos. Los seleccionados habrían sido ayudado por Nicholas John Blair (hijo del ex primer ministro del Reino Unido, Tony Blair) y Matías Bunge, respectivamente, al fungir como socios.
Matías Bunge ya no representa a Herrera, pero sí a Reyes. El argentino es operador del Grupo Comercializador Cónclave que sirvió para transferir Reyes (y a Tecatito) al futbol europeo desde las Águilas, cobró las comisiones a través de él. El mismo grupo ha sido involucrado en la "Estafa Maestra" por un fraude de millones de pesos al gobierno mexicano, también como parte de la estructura usada para favorecer el "Monexgate" y cuyo representante fue algún día Rodolfo David Dávila Córdoba, acusado de ser operador financiero del Cártel de Juárez. Cónclave fue reportada este año por el Servicio de Administración Tributaria como empresa "fantasma".
La Liga Portuguesa de Futbol se rige por un estatuto que contempla nueve principios: legalidad, igualdad, ética, lealtad y verdad deportiva; buena fe, colaboración, protección de buen nombre del futbol profesional, transparencia, diligencia y solidaridad. Aplicables a todos los socios o prestadores de algún servicio a la liga. Cualquier violación a alguno de esos puntos obliga al sujeto a someterse al Consejo Jurisdiccional; sus miembros son licenciados en derecho y ejercerán el poder disciplinario determinado tras un proceso de deliberación.
Desde la publicación de sus comunicados, los jugadores no han hablado sobre estos señalamientos y sus actividades en el futbol continúan sin contratiempos. A diferencia de la situación de Márquez con el gobierno estadounidense, se trata de un trabajo periodístico y las autoridades de Portugal no han reportado investigaciones relacionadas con la supuesta evasión de impuestos de Reyes y Herrera. O al menos por ahora.
