ANÁLISIS
Sergio Ramos está de vuelta con el Real Madrid. “Qué ilusión me hace decir: ¡listos para mañana!”, publicaba este martes por la tarde en sus Redes Sociales. No obstante, había estado fuera casi veinte días por una lesión en el sóleo izquierdo, justo en uno de los momentos más sensibles de la temporada para los blancos. Pero ya está recuperado de su lesión. Volverá a la convocatoria ante el Leganés en Copa, aunque Zidane no quiso confirmar cuántos minutos podría jugar el de Camas, ni si éstos llegarían desde el inicio. Es presumible que no muchos, de momento.
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Afortunadamente para Zidane, tanto Nacho Fernández como Raphael Varane están a su disposición para jugar ante los pepineros. Y con el español a un nivel superlativo. Seguramente, a su mejor nivel visto nunca. No sólo ya por lo eficaz y lo resolutivo a lo que ya tiene acostumbrado a su equipo, sino que este año le ha sumado mucho más. Lo primero, regularidad en forma de minutos, y es que es el segundo más utilizado por el técnico este curso. Sin lesiones desde infantiles y cuidando al máximo su profesionalidad, siempre está disponible para el técnico, aunque éste no siempre le haya dado tantas chances como en el presente curso.
En parte, por las continuas lesiones de sus compañeros -Vallejo y Varane, pero también Carvajal este año-. Y aquí llega también el otro punto fuerte de su crecimiento actual, en parte también porque su influencia está creciendo a pasos agigantados. Fuera del campo es uno de los más respetados por sus compañeros, y dentro del campo este año ha destacado también con actuaciones impolutas en momentos clave. La última, ante el Deportivo, con un doblete -el primero en toda su carrera- y salvando también un gol bajo el larguero.
Así las cosas, ante la dilatada ausencia de Jesús Vallejo y la presencia fija del capitán Sergio Ramos en cuanto alcance el 100% de su forma, el debate entre el madridismo se centra ahora en los roles de Nacho Fernández y Varane para los próximos partidos grandes del Real Madrid. Y es que mientras el español ha crecido, el francés viene demostrando mucha más inconsistencia este año, pese a ser la apuesta del club y del cuerpo técnico para acompañar al de Camas. A buen seguro que el madridismo celebra la recuperación de Sergio Ramos por todo lo alto, pero viendo cómo despidieron a Nacho el pasado domingo, seguro que no les hace nada de gracia que sea Nacho el que desaparezca ahora de los onces de Zidane con el retorno del capitán.
