ANÁLISIS
El gol se se le estaba resistiendo a Luis Suárez en la Champions League, donde se estrenó recién en el partido de ida de los cuartos de final ante Roma, en el Camp Nou. De hecho, el último tanto del uruguayo en la máxima competición era en marzo de 2017, desde la célebre remontada ante el PSG en el Camp Nou, cuando abrió el marcador de aquella mágica noche para el barcelonismo .
De hecho, Suárez necesitó 13 remates para marcar en el torneo.
Las actuaciones con Uruguay y con el Barcelona en LaLiga han ido poco a poco despertando levemente el olfato del delantero charrúa, quien vivió un arranque goleador algo perezoso, evidenciando que su menor eficacia de cara a la portería contraria era debido al cambio de posición en el campo, tras haber cedido al inicio de temporada la posición central del ataque culé a Lionel Messi . El regreso del de Salto al frente del ataque blaugrana se ha traducido en más oportunidades y goles, al menos en el campeonato doméstico.
El que fuera Pichichi de LaLiga en la temporada 2015-16, con 40 dianas, exhibe esta campaña 22 tantos en 26 partidos en LaLiga. Recuperando su mejor versión, la cual, y a principios de diciembre solo arrojaba unos tímidos registros de 6 dianas en 11 encuentros en el torneo liguero.
En la Champions League, el delantero necesitó nueve encuentros para marcar.
