240518 Colo Colo Atlético Nacional Héctor TapiaJoaquín Sarmiento/Getty

Tapia es el máximo artífice


OPINIÓN


Pese a que en la conferencia posterior al empate ante Nacional el DT avisó que el mérito era todo de los jugadores, la realidad es que Héctor Tapia es el máximo artífice: si el Cacique seguirá compitiendo en el segundo semestre en la Copa Libertadores será porque su nuevo entrenador entendió que conquistar los puntos estaba por sobre todo lo demás.

Tito agarró al plantel al borde del nocaut después de haberse inclinado en casa ante Delfín y lo levantó a punta de pragmatismo y pensando más en el arco propio que en el contrario. Así, cimentó el éxito venciendo en Manta, imponiéndose sin mayores sobresaltos a Bolívar y faltándole el respeto a un inquebrantable Verdolaga, que en casa no se cae con (casi) nadie. "El equipo tenía que sobreponerse a la falta de credibilidad y lo sacó adelante", fue su lectura.

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Guede abandonó el barco cuando la ilusión parecía consumada y ahí está el peso del premio que consiguió el cuerpo técnico que asumió ante la necesidad. Más allá de saldar la deuda propia y la del fútbol chileno en general a nivel internacional, levantó a un equipo con la confianza a la baja y con una zaga feble en línea de tres. El ex atacante apostó por cuatro en el fondo y dejó en solitario al eterno Paredes, situación que le permitió ganar juego en el medio. Poco le importó promediar un 27% en la posesión de balón en el juego de Medellín. Poco le importó no patear ni una vez al arco. Es que era incapaz de jugarle de igual a igual. Tapia consiguió el objetivo del año, llenó las arcas en Blanco y Negro y, como lo confirmó su presidente Gabriel Ruiz-Tagle, la elección de los próximos refuerzos depende exclusivamente de él.

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