CONMEBOL está decidida a mostrar firmeza con las sanciones y Flamengo es una de las primeras muestras. El club rubronegro, primer rival de River en la Copa Libertadores 2018, deberá jugar sus primeros dos encuentros internacionales a puertas cerradas, como consecuencia de los graves incidentes de la final de la Sudamericana ante Independiente.
Entre los cargos imputados al club carioca figuran lanzamiento de objetos al campo de juego, utilización de pirotecnia, daños, falta de orden antes, durante y después del encuentro y no haber identificado a los agresores. Cabe recordar que los hinchas del Rojo que se movilizaron hasta Río de Janeiro vivieron una noche violenta y caótica, más allá de haber festejado el título más tarde.
De acuerdo al comunicado oficial del organismo, solo estarán autorizados para ingresar 70 personas de la delegación del Fla, entre futbolistas, cuerpo técnico, médicos, dirigentes y asistentes; 20 personas de la Confederación Brasileña de Fútbol; periodistas acreditados hasta 24 horas antes, todos identificados ante CONMEBOL; técnicos de la televisión; 12 alcanzapelotas; policía con tareas específicas asignadas; personal de infraestructura del estadio; una delegación de 70 personas del conjunto visitante. Además, se impuso una sanción de 300 mil dólares, que serán descontados de los ingresos televisivos.
El Millonario visita a Flamengo el 28 de febrero, en tanto que el siguiente partido del rubronegro como local será el 18 de abril ante Independiente Santa Fe.
