El golpe que Croacia le propinó a la Argentina es directamente proporcional a la ilusión que se había generado alrededor de la selección. Una ilusión que, ahora, pende de un hilo. El error fatal de Willy Caballero dejó al seleccionado al borde de la eliminación, pero es solo el último eslabón en una cadena de errores y culpas que empezaron mucho antes de que arranque la Copa del Mundo.
JORGE SAMPAOLI
El principal responsable del momento que atraviesa la Albiceleste. Desde que asumió hasta ahora, cometió error tras error: desde el final de las Eliminatorias hasta este último partido, nunca pudo encontrar el funcionamiento, armó una lista de convocados para la Copa del Mundo con serias fallas, le tiró toda la responsabilidad a Messi cuando dijo que era "su equipo", no se la jugó por su estilo en el encuentro ante Islandia y fue contra sus convicciones con un planteo inentendible, tardó y se equivocó en los cambios en ambos cotejos... La lista es tan larga como todo lo que falta para el Mundial de Qatar y difícilmente estará a tiempo de revertirlo.
LA DIRIGENCIA
JUAN MABROMATA/AFP
Chiqui Tapia, Daniel Angelici, la Comisión Normalizadora, Luis Segura... Desde que terminó el último Mundial hasta ahora, la AFA, lejos de proyectar sobre las conquistas conseguidas, se encargó de dinamitar cualquier posibilidad de potenciar al seleccionado. Este grupo de dirigentes no solo es responsable por los tres técnicos que pasaron en el último ciclo de Eliminatorias, sino también de la falta de orientación en los juveniles y diferentes desavenencias organizativas en el último tiempo.
WILFREDO CABALLERO
La cara de la derrota, como pocas veces antes. El pase atrás de Mercado y la pifia de Caballero quedarán en la historia como uno de los errores más graves de la historia. Pero no solo porque significó un gol en contra, sino porque también generó el descontrol del resto de los jugadores, quienes no encontraron soluciones para revertir la situación.
JAVIER MASCHERANO
Uno de los referentes del seleccionado que, una vez más, queda expuesto por un partido flojo y una imagen final en la que se desentiende en el tercer gol de Rakitic. Desbordado por tener que cumplir funciones en las que nunca se destacó a lo largo de su carrera, el volante quedó comprometido tanto por su nivel como también por las decisiones del DT a la hora de plantear el partido.
LIONEL MESSI
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Es el mejor jugador del mundo. El más desequilibrante que tiene la selección. Y la única verdadera esperanza. Pero no apareció nunca. Ni ante Islandia ni contra Croacia. Que el sistema no lo haya ayudado o Sampaoli haya estado lejos de rodearlo de la mejor manera justifican sus ausencias. Leo no tuvo la rebeldía necesaria para ponerse a un equipo que nunca funcionó al hombro. No dio la cara y esa responsabilidad también le cabe por ser el quien es.
